El edificio okupa de Carabanchel.

El edificio okupa de Carabanchel. Jesús Soler

Sociedad

Desalojan a dos familias del edificio macrookupado de Carabanchel: los okupas les acusan de "traidores"

La macrookupación tuvo lugar en la calle Excelente número 6 de Madrid durante el puente de la Inmaculada.

Más información: El infierno de los 100 vecinos que sí pagan el alquiler tras la macrookupación de Carabanchel: "Son violentos"

Publicada

La empresa de desokupación Servi-okupa ha conseguido desalojar a dos familias de dos pisos del edificio de lujo macrookupado ubicado en la calle Excelente número 6, ubicada en Carabanchel Alto, según informan los vecinos que viven legalmente en el inmueble. 

Entre gritos "traidores" y diversos insultos por parte de otros vecinos okupas, dos familias han abandonado ya el edificio, sin embargo, los vecinos que sí pagan el alquiler se quejan de que el problema "aún continúa". 

El desalojo fue pacífico y negociado. Al parecer, según fuentes vecinales, el gerente de Servi-okupa habló con las familias y les ofreció retirar las denuncias a cambio de que desalojaran el edificio. Muchos de los okupas tienen una situación legal y de residencia irregular y tener denuncias por okupación no favorece a la regulación de sus papeles en España. 

Un portavoz de los vecinos que sí residen legalmente en la calle Excelente número 6 pone en valor este movimiento, pero también expone que "el problema continúa y va para largo". De hecho, también apunta a que durante el fin de semana "han entrado en el inmueble otras dos familias nuevas de okupas".

Servi-okupa es la misma empresa de desokupación que desalojó 12 pisos en El Cañaveral a finales de agosto de 2024. Aquel caso fue muy similar al de Carabanchel, puesto que la convivencia con el resto de vecinos también era complicada.  

Por su parte, la Policía Nacional mantiene una investigación abierta sobre la macrookupación de varios bloques de viviendas ocurrida el pasado mes de diciembre, antes de las fechas navideñas, en una urbanización del madrileño PAU de Carabanchel Alto.

Según las primeras pesquisas, y según confirmaron los vecinos a Madrid Total, una mafia habría vendido ilegalmente estas viviendas, que todavía no estaban habitadas, a familias de origen peruano por unas cantidades entre los 2.000 y los 3.000 euros. Se las habían ofrecido hace semanas en la cola de un comedor social de una iglesia del barrio.

La macrookupación tuvo lugar en la calle Excelente número 6 de Madrid durante el puente de la Inmaculada. Casi una treintena de familias llegaron a la urbanización con furgonetas de mudanza y, tras cambiar las cerraduras de los pisos, entraron en los mismos frente al asombro de los vecinos que legalmente se encuentran viviendo en el lugar, pagando alquileres que oscilan entre los 800 y los 1.300 euros.

Tal y como contaron los vecinos que viven en este inmueble de forma legal, los usurpadores "cuentan con su propio conserje" que les abre la puerta "desde el interior empujando la manilla". Los vecinos que sí pagan su alquiler se quejan de que "no respetan las normas de convivencia, hacen ruidos por la noche, se pelean" e incluso se han metido "miembros de bandas latinas". 

La empresa propietaria ha reforzado las medidas de vigilancia, ha colocado alarmas y ha contratado a una empresa de desokupación, cuyos empleados fueron increpados y atacados por parte de algunos okupas cuando hicieron acto de presencia. Por todo ello, han interpuesto las correspondientes denuncias en comisaría. De momento, no hay detenidos, según las mismas fuentes.

Ante este nuevo caso de okupación masiva, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, subrayó el pasado martes la necesidad de alejarse de la "frivolización" sobre este problema: "Para todos aquellos que dicen que en España no hay un problema de okupación, que vayan allí, que vayan a ese inmueble y que le digan a los vecinos si hay un problema de okupación o no". 

Insistió en que es esencial modificar la normativa para facilitar el desalojo rápido de los okupas, asegurando que el Ayuntamiento hará todo lo posible para apoyar a los vecinos y mejorar su seguridad y convivencia.

En la misma línea, la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, recordó este jueves que la okupación es un asunto que le "indigna especialmente" y crea "impotencia" en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. "Es urgente modificar la ley", dijo Sanz, que aboga por una reforma legislativa que permita expulsar a los okupas en "24 y 48 horas".