Los vecinos de San Blas se han despertado este martes y, otro día más, ven en los periódicos y en las noticias el nombre de su barrio, y no es por algo bueno: "Nos quejamos de inseguridad en el barrio y nadie nos escucha, y directamente, hoy ha habido un asesinato, aquí, en plena calle", se lamenta una vecina sentada en un banco de la calle Francisco Íñiguez Almech, junto con unas amigas. Hablan del asesinato de David. 

Y es que, este joven de 26 años, fue asesinado hacia las 5.00 horas del martes tras recibir una puñalada con una botella de cristal rota en una axila. Todo apunta a que el ataque le perforó la arteria braquial, lo que le provocó un sangrado masivo, cuyos restos aún se pueden ver en el suelo de las calles Francisco Íñiguez Almech y Herencia, a pesar de las labores de limpieza que realizó la Policía Científica durante la mañana del martes.

"Yo estaba en casa cuando todo sucedió, se escucharon perfectamente los gritos de una persona que pedía socorro y auxilio. Decía que su amigo había perdido mucha sangre y que se iba a morir, fíjate si lo dijo fuerte, que yo que vivo en un octavo piso lo escuche todo a la perfección", relata una vecina del barrio. 

En cuanto al origen de la pelea, los vecinos hablan de "problemas con drogas": "Ese es además uno de los grandes males del barrio de San Blas. David trabajaba en la obra, en lo que podía, pero todo comenzó por un tema de tráfico de drogas y eso desencadenó una pelea que se fue de madre", narra un vecino que conocía a la víctima. 

La discusión fatal comenzó en una gasolinera ubicada a unos 500 metros del lugar en el que David perdió la vida. Tras recibir la puñalada, y probablemente asustado tras ver que estaba perdiendo mucha sangre, David echó a correr hasta que se desplomó debajo de un soportal en el cruce de las calles Francisco Íñiguez Almech con Herencia.

Varios vecinos ya habían llamado a la Policía porque escucharon los gritos del acompañante de David, que era "uno de sus mejores amigos" tal y como relatan fuentes vecinales. A su llegada, los agentes comenzaron a hacerle un torniquete para evitar que perdiera más sangre, pero David ya estaba en parada cardiorrespiratoria. 

Después, los equipos de Emergencias continuaron las maniobras durante unos 20 minutos. Pero, por desgracia, no obtuvieron resultado y finalmente, tuvieron que confirmar el fallecimiento. Por otro lado, los psicólogos del Samur-Protección Civil tuvieron que atender al amigo de la víctima y también trasladaron la triste noticia a sus familiares. A las pocas horas de que David perdiera la vida, la Policía Nacional dio con su agresor, un varón de 30 años de origen tunecino, al que detuvieron y trasladaron a dependencias policiales. 

Ahora, la Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer estos hechos. Un trabajo que está en manos del Grupo VI de Homicidios, que han llevado a cabo las primeras pesquisas y han decretado el secreto de sumario ante el caso. Sin embargo, fuentes policiales sí confirman que por la naturaleza de los hechos, este triste suceso no tiene ninguna relación con bandas latinas.