La Guardia Civil de Torrelaguna (Madrid), en el marco de la 'Operación Daisy', ha logrado la detención de dos personas que se dedicaban al cultivo de marihuana 'indoor' en su propia vivienda ubicada en la localidad de Cabanillas de la Sierra (Madrid).
La investigación se inició el pasado mes de enero, cuando se tuvo constancia previamente que la vivienda desprendía un fuerte olor a marihuana y emitía un sonido constante de lo que parecían ser motores de calefacción, lo que hacía pensar que en su interior se pudiera estar cultivando cannabis
Las investigaciones desarrolladas por los agentes permitieron confirmar dicha hipótesis y obtener indicios suficientes para solicitar una autorización de entrada y registro a la autoridad judicial competente.
Finalmente, una vez obtenido el auto de entrada y registro por parte del Juzgado de Instrucción correspondiente, los investigadores han logrado incautar en el interior del chalet, en su mayoría almacenada en la planta baja, 575 plantas de marihuana, 20,609 kilogramos de cogollos de marihuana y 18,222 kilogramos de marihuana picada.
Además, se han intervenido 56.238,35 Euros y 3.680 Libras Esterlinas en metálico, así como dos vehículos, tres ordenadores portátiles, siete teléfonos móviles, una navaja y un puño americano.
Las dos personas detenidas, un varón de 65 y una mujer de 64 años, ambos de origen español, pasaron a disposición judicial tras la imputación de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas en su modalidad de cultivo y un delito de defraudación de fluido eléctrico. El Juez Instructor decretó la entrada en prisión de ambas personas.
Droga en máquinas expendedoras
Por otro lado, el pasado miércoles 3 de abril, agentes de la Policía Municipal incautaron un total de 1.269 gramos de diversos productos derivados de la marihuana que estaban a la venta en dos máquinas expendedoras ubicadas en la calle de Cruz, ubicada en el distrito Centro, tal y como informa un portavoz del citado cuerpo de Policía.
Al parecer, los agentes vieron que en el interior de estas máquinas de 'vending' había diversos productos de comida y bebida y también unas bolsas de plástico transparentes con sustancias vegetales en forma de cogollo.
Al tratarse de un pequeño local con máquinas expendedoras, no había nadie atendiendo a los clientes, por lo que los agentes trataron de contactar el encargado del negocio. Finalmente, un empleado de la limpieza facilitó a las autoridades un contacto responsable de este local de máquinas de 'vending'.
Al abrir las máquinas expendedoras, los agentes incautaron un total de 1.269 gramos de diversos productos derivados de la marihuana. En las etiquetas de las bolsas aparecía que en su interior había cristal LSD y bellotas de hachís.
Tras intervenir todos los productos, se han enviado al laboratorio para comprobar su nivel de pureza. No se han producido detenciones, puesto que los productos derivados de la marihuana, que incluyen el principal compuesto psicoactivo del cannabis por debajo del 0,2%, se pueden comercializar.
Sin embargo, los productos incautados no tenían ningún tipo de etiquetado sanitario y tampoco estaba escrito en castellano, lo que incumple la ley de venta de productos que indica que todos los productos expuestos para su venta deben tener su etiqueta escrita en español.