Fijaban un objetivo, normalmente viviendas unifamiliares, entraban con sigilo al caer la tarde, robaban todo cuanto podían, lo llevaban al 'compro oro' y volvían a su país con botín. Así era la forma de actuar de los dos ladrones de 26 y 29 años que, finalmente, no pudieron dar el último paso de su plan y fueran arrestados por la Guardia Civil, en el marco de la operación 'Habitat Ángeles'.
Una operación que toma su nombre por la forma de actuar de los ladrones, pues parecía que entraran en las casas volando, tal y como explica un portavoz de la Guardia Civil a este periódico. La pareja llegó a cometer una treintena de robos en viviendas situadas en Torrelodones, Boadilla del Monte, Las Rozas de Madrid, Arroyomolinos, Griñón y Pozuelo de Alarcón.
El modus operandi de esta dupla era siempre el mismo: elegían un objetivo ubicado en una urbanización de clase alta, normalmente viviendas unifamiliares rodeadas de jardines, nunca chalets adosados por la presencia de los vecinos. A continuación, realizaban una metódica vigilancia de quién vivía dentro y comprobaban si tenían o no una alarma instalada. Tras haber realizado esta labor, entraban de manera sigilosa escalando a la segunda planta donde robaban todo lo posible.
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Tal y como explican fuentes de la Guardia Civil, en alguna ocasión, llegaron a encontrarse con los habitantes de la casa, pero como detallan estas mismas fuentes, no se trata de ladrones violentos, por lo que escapaban de la escena cuando veían el más mínimo riesgo.
Al parecer, se trataba de dos personas muy voraces a la hora de perpetrar los robos, una vez habían elegido la zona, cometían mínimo tres robos en viviendas diferentes.
Sin embargo, diversos cámaras de estas urbanizaciones grabaron a esta pareja de jóvenes ladrones. Además, las denuncias de los vecinos coincidían, motivos por los que la Guardia Civil pudo finalmente atar cabos y dar con la dupla de ladrones. Normalmente, sustraían objetos de pequeño tamaño y fácilmente transportables, decantándose principalmente por dinero, joyas, relojes y material electrónico o informático.
Dada la elevada actividad delictiva del grupo, la benemérita ha realizado una entrada y registro en la vivienda que tenían en Getafe, donde se intervinieron gran cantidad de joyas, relojes, material informático, electrónico y herramientas utilizadas para forzar y violentar los cierres. También intervinieron el vehículo con el que se desplazaban para cometer los robos.
Los dos detenidos no tienen antecedentes previos en España y tenían previsto abandonar el país, una vez hubieran finalizado la campaña de robos de dos meses de duración.