Amigos, vecinos y familiares buscan desde el pasado día 14 a Pedro Jiménez Vargas, un joven de 25 años cuya pista se perdió en Madrid, según informa la entidad SOS Desaparecidos.
Pedro Jiménez mide 1,75 metros y pesa 70 kilos. Luce barba y cabello negro y sus ojos son marrones. En el momento que desapareció vestía jersey azul claro de manga larga, pantalón de chándal negro y deportivas oscuras. Padece una discapacidad intelectual.
Tal y como informa Europa Press, se sigue buscando desde hace más de un mes a un vecino de Getafe de 51 años que se llama José Antonio Saugar Carretero. Mide 1,60 metros y pesa 55 kilos. Tiene los ojos de color marrón y el pelo castaño.
Para comunicar cualquier información que ayude a dar con el paradero de este hombre que lleva tres semanas desaparecido, se pide contactar con la Policía Nacional en el teléfono 091 o con el 112. O a los teléfonos de la asociación 649 952 957 y 617 126 909.
Otras desapariciones
Amigos, familiares y vecinos de Víctor Tapiador siguen buscando a este joven auxiliar de enfermería e integrador social de 25 años que desapareció hace casi tres meses en extrañas circunstancias en la localidad de Aranjuez, ha informado a Europa Press el portavoz de la familia, Jorge Sabugal.
Todo ocurrió el 8 de marzo pasado. Tras acudir por la mañana a trabajar, comió en casa de su hermana y se fue a tomar un café con un amigo. En la cafetería avisó a su madre que pronto subiría a casa y se marchó del lugar sobre las 17 horas.
A partir de esa hora se le pierde la pista. Su madre le envió varios mensajes de texto a su móvil, que figuraban como leídos, pero que Víctor nunca respondió. Tampoco más tarde a sus llamadas, por lo que se empezó a preocupar.
Al día siguiente, como no durmió en su domicilio, su móvil estaba apagado y los mensajes aparecían como no recepcionados, la madre de Víctor denunció su desaparición. El hecho de que no se presentara a trabajar al centro hospitalario San Juan de Dios de Ciempozuelos, donde entre sus compañeros está su padre y otros familiares, les inquietó a todos. Nunca había faltado, ni estando enfermo.
Más adelante descubrieron que su coche estaba aparcado cerca de su vivienda. Por un ángulo de las cámaras interiores del supermercado de enfrente descubrieron que esa misma noche, sobre las 23.30 horas, Víctor aparcó tranquilamente el coche allí. Al poco tiempo volvió y dejó dentro su cazadora, cuando en la calle hacía 8 grados, y marchó caminando hacia la rotonda por la que se entra a Aranjuez desde la A-4. Nunca más ha vuelto ni se sabe nada desde entonces del joven.
Tras la denuncia, los agentes hablaron con la hermana con la que comió y con él amigó con el que tomó café Víctor ese día y ambos aseguraron que no observaron ningún comportamiento extraño ni él les comentó nada raro ni la posibilidad de pasar esa noche fuera de casa. La familia tampoco entiende por qué dejó el abrigo y las llaves de su domicilio en el coche, pero sí se llevó su documentación y su teléfono móvil, que se apagó sobre las 2.45 horas.
El portavoz de la familia, primo del desaparecido, cree que quedó con alguien en esa rotonda para montarse en otro coche, ya que es un lugar propicio para ello. Víctor no tenía problemas económicos ni personales que se supieran, por lo que su círculo de amigos está desconcertado.
De hecho, estaba más contento de lo normal, puesto que estaba remontando de una relación sentimental truncada en noviembre y le habían hecho un contrato fijo en el centro sanitario en donde trabajaba.
La familia, primero con ayuda de la Policía y luego de voluntarios, ha organizado dos batidas en la zona del Mar de Ontígola, que es donde dio como última señal la antena de su móvil antes de apagarse. Pero no han encontrado ningún resto de ropa o pista sobre su desaparición. También han informado del caso a asociaciones de desaparecidos, el Centro Nacional de Desaparecidos y muchos medios de comunicación sin recibir ningún dato que aporte algo relevante, pese a las 12 semanas transcurridas.
Ante la falta de pruebas, la Policía considera que es una desaparición voluntaria, sin indicios de criminalidad, y el Juzgado número 4 de Aranjuez ha archivado provisionalmente el caso, ha indicado a Europa Press Jorge Sabugal, que se queja de que el juez no les han dado acceso a las últimas llamadas y mensajes de su primo en el móvil ni a los movimientos de sus cuentas bancarias. La familia ha recurrido el archivo de la causa, en la que se presentaron como acusación particular.
Mientras, siguen con su búsqueda difundiendo carteles con su nombre y datos. Víctor mide 1,84 metros de altura, pesa 90 kilos, tiene el pelo corto, liso y castaño, ojos marrones y tiene algunos tatuajes. Ante cualquier pista o avistamiento sobre estas y otras personas que figuran desaparecidas se puede comunicar en los teléfonos 112 (Emergencias), 061 (Guardia Civil), 091 (Policía Nacional) o en los teléfonos habilitados por SOS Desaparecidos (642 650 775 y 649 952 957).