El espíritu de Mayte Commodre todavía se siente en el emblemático edificio que conserva ese rótulo histórico 56 años después, en el número 5 de la plaza de la República Argentina de Madrid.
En la misma ubicación, abre el restaurante Trocadero Commodore. El grupo de restauración más importante de la Costa del Sol, Trocadero, de la familia Hernández-Gil, ha inaugurado este martes 10 de octubre su primer restaurante en la capital española. El nuevo establecimiento está dirigido por Bárbara Pérez Manzarbeitia y Luis Sartorious (el hermano de Isabel Sartorius, la primera pareja de Felipe VI).
Pero todo lo empieza la gran María Teresa del Carmen Aguado Castillo, que fundó el famoso restaurante en 1967 en Madrid y acabó revolucionando la gastronomía. En Mayte Commodre se reunían desde el rey emérito hasta Santiago Carrillo. Por sus mesas pasaron personajes como Juan Domingo Perón o Ernesto Che Guevara.
El emblemático edificio que conserva el rótulo de Commodore, en el número 5 de la plaza de la República Argentina de Madrid.
Ahora, Trocadero hereda el nombre de Commodore, pero no es casualidad. Además de estar protegido por ser rótulo histórico, también posee un fuerte vínculo familiar con los primeros propietarios del local.
"Hemos conocido Mayte Commodore. Nos hemos criado en este barrio. Iba a clase con la nieta de Mayte. Por eso nos hace ilusión continuar con la tradición y darle este apellido a Trocadero Madrid", explica Jorge Hernández-Gil, director general del Grupo Trocadero, a Madrid Total el día de la inauguración.
Trocadero Commodore mantiene el espíritu del chiringuito en Madrid con un carácter alegre y desenfadado, un servicio cercano y una oferta gastronómica en la que el producto del mar desempeña un papel destacado, con un ticket medio de 80 euros por persona.
La carta sigue la estructura que ha hecho famoso al grupo, con énfasis en pescados, arroces y carnes; pero añade como novedad en la capital una barra de sushi.
Además, se incorporarán nuevos platos con guiños a la cocina madrileña y a la propia Mayte Commodore. "Pretendemos recomendar fueras de carta en honor a Mayte, como los platos de caza", detalla Hernández-Gil.
Y es que, la gran hostelera dejó emblemáticas recetas, sobre todo de carne de caza, pero también otras como el bistec al whisky o el ganso a las frambuesas. A su vez, por sus grandes aficiones creó un premio taurino para los triunfadores de la Feria de San Isidro y otro teatral. "Nos gustaría en un futuro hacer más guiños a Mayte, como retomar los premios", asegura el director del Grupo Trocadero.
Trocadero Commodore añade como novedad en la capital una barra de sushi.
"Totalmente diferente"
Aunque se homenajea a Mayte Commodore puntualmente, "Trocadero es totalmente diferente", aseguran los directores de Trocadero en Madrid, Luis Sartorious y Bárbara Pérez Manzarbeitia, a este periódico. El matrimonio, que se dedica a la hostelería madrileña con el foco en la comida japonesa, informa de que el restaurante abre a diario hasta las dos de la madrugada, con cocina ininterrumpida hasta medianoche.
También hace una gran apuesta por la coctelería, retomando el ambiente nocturno que se creaba en Mayte Commodore.
África
En cuanto a la decoración, el nuevo restaurante, que tiene un aforo de 300 personas, se distingue por referencias internacionales y sutiles referencias africanas, presentes en otros locales de la Costa del Sol. El uso de materiales nobles como madera, piedra, latón y telas, garantiza que el sello Trocadero sea reconocible fácilmente.
Su decoración tiene referencias internacionales y sutiles referencias africanas.
El restaurante se divide en dos plantas con múltiples zonas, que incluyen salones principales, terraza a pie de calle, terraza en la segunda planta con vistas a las calles Serrano y Joaquín Costa, zonas de sofás con barra propia, zonas de mesas altas y una barra principal para picoteo.
La llegada del Grupo Trocadero a la capital tiene un objetivo claro: "Buscamos ser una referencia gastronómica y de planes en Madrid como lo fue Mayte Commodore".