Érase una vez un Gobierno en minoría. Así pueden empezar muchos de los enredos políticos que, tras un año de las elecciones del 28-M, se están viviendo en los municipios de la Comunidad de Madrid.
Mociones de censura, uniones de partidos inverosímiles que impiden sacar presupuestos (como es el caso de Arganda del Rey) y, ahora, pactos secretos que se rompen cuando la baraja se tensa demasiado.
Así ha pasado en Leganés. Un lugar en el que el Partido Popular, con nueve concejales, y el partido local Unión Por Leganés (ULEG), con tres, y gobiernan en minoría y se han visto obligados a "repartirse los papeles" para conseguir sacar acuerdos con todos los grupos políticos.
El Partido Popular firmó un pacto secreto con Vox y, mientras, Unión por Leganés intentaba hacer lo propio con los partidos de la izquierda (Más Madrid y Podemos). ¿El problema? Que el espectáculo de equilibrios ha terminado por romper los platos y Vox, en un pleno en el que se aprobaban proyectos por casi 40 millones de euros, ha dicho "basta".
Los del partido de Abascal, con dos concejales, votaron en contra de las modificaciones presupuestarias presentadas en el pleno del miércoles. Algo que no sentó nada bien a los populares y que ha llevado a la portavoz de Vox, Beatriz Tejero, a desvelar que tenían un pacto.
No es un pacto de Gobierno
El Partido Popular no ha tardado en aclarar que no se trata de un pacto de Gobierno, pero tampoco ha podido negar que se ha mantenido en secreto desde marzo, momento en el que se firmó. Afirman que lo hicieron para "potenciar la estabilidad de los proyectos en beneficio de los vecinos".
Pese a que el Partido Popular de Leganés hable de que no es un pacto de legislatura, como el que pudieron llegar con ULEG, los tres proyectos con los que se comprometieron con Beatriz Tejero y los suyos tienen un horizonte de legislatura: diciembre de 2026.
Ahora, el PP insiste en que no ha incumplido ese acuerdo y que ha sido Vox quien lo rompe, "votando en contra de las modificaciones presupuestarias en el Pleno dirigidas a proyectos como mejorar instalaciones deportivas municipales, renovar áreas ajardinadas, rehabilitar aceras en Leganés Norte o apoyar las actividades de las casas regionales".
Madrid Total ha tenido acceso al acuerdo entre ambos partidos (PP y Vox) y el Partido Popular dice una verdad a medias. Los concejales de Vox tienen libertad de voto en "mociones políticas" y aquellas que suponen una fiscalización si antes no ha habido consenso. Y, como explica Tejero a este diario, no lo ha habido.
"Son ellos los que están incumpliendo nuestro acuerdo porque en el Ayuntamiento hay 65 millones de remanentes de tesorería y antes del pleno nos pasan unos documentos en los que no aseguran que las modificaciones que afectan a nuestros proyectos irán al final", denuncia.
Trasladando el mensaje político al coloquial vendría a ser que el PP le pidió a Vox que le aprobara todo lo que ellos pedían para que los de Abascal confiaran en que, después, ellos les aprobarían las suyas. Por eso Tejero no da por rotas las relaciones y dice, en declaraciones a este diario, que si vuelven a presentar las propuestas, incluyendo sus proyectos, les dará el "ok".
Por su parte, fuentes del Partido Popular, insisten en que es imposible que Vox vea que se ha incumplido el acuerdo cuando los plazos para poner en marcha sus tres proyectos son diciembre de 2026.
Aunque es cierto que con proyectos como la construcción de un centro polivalente, es necesario dar pasos ya para que esté activo en 2026. "Los plazos son largos, si no se cumplen ya no se van a cumplir. Lo que quieren es que apruebe una carta en blanco", lamenta.
Moción de censura
En todo este lío del acuerdo entre el PP y Vox ha salido un tercer perjudicado: ULEG. El partido local coordinado por Carlos Delgado ha terminado siendo atacado por esta rúbrica entre partidos y hasta han pedido su dimisión.
En declaraciones a este medio, insiste en que aunque no conocía los términos "exactos" del acuerdo, sí sabía que ellos debían de pactar con los partidos de la izquierda y el PP con Vox.
Delgado deja entrever, incluso, la posibilidad de que la edil de Vox esté planteando una moción de censura, puesto que las cuentas a la izquierda no le cuadran por sólo un edil. "Podría ser una tránsfuga", deja caer abriendo la posibilidad de que Vox se alíe con el PSOE para plantear una moción de censura encubierta como la que vive Arganda del Rey.
Pero Tejero lo niega en rotundo. Asegura que ni quiere estar en el Gobierno de Leganés (aunque es cierto que eso es una posibilidad que ULEG le negó desde un primer momento), ni pactar con "la izquierda". "Cualquiera que se crea eso es que no me conoce a mí, ni a Leganés, ni al PSOE", finaliza.
Sobre los pactos de ULEG con los partidos de izquierdas, Carlos Delgado no niega sus acercamientos para temas puntuales con Más Madrid y Podemos, pero nunca con el PSOE. Dice que no es algo que dependa de él, sino que los socialistas tienen bastantes líos internos y "peleas entre familias" como para estar a eso.