Aunque las cifras del primer trimestre ya anticipan que no se podrán alcanzar las cifras de 2021, el freno en la inversión es mucho menor que en otros sectores. La Inteligencia Artificial sigue captando la atención de inversores a nivel mundial. Ahora bien, ¿cuáles son los factores a los que conviene no perder de vista en 2022? ¿Qué tendencias marcarán su evolución en lo que queda de año?  

La guerra en Ucrania, o la campaña electoral en Corea del Sur, han hecho que, por ejemplo, los deepfakes cobren aún más relevancia, y que se ponga de nuevo la atención en detectar posibles falsificaciones que puedan afectar a la política o la economía de una región. También el metaverso ha cobrado especial relevancia en 2022, y con él la necesidad de nuevas herramientas de moderación de contenido impulsadas por IA para monitorizar los comportamientos tóxicos online.

Estas son las siete tendencias que conviene seguir de cerca en el último trimestre de 2022:

1. Datos sintéticos para asegurar la privacidad

Las empresas de todo el mundo están experimentando con conjuntos de datos sintéticos para permitir el intercambio de datos y la colaboración, mientras cumplen con el GDPR y otras leyes de privacidad. Estos datos permiten reducir de meses a días el tiempo necesario para disponer de datos anonimizados y de calidad.

Estos datos son ficticios, es decir, no identifican a ninguna persona concreta. Pero, por lo demás, imitan en todo a los reales. Por ello, son una herramienta muy valiosa durante el desarrollo de modelos de Inteligencia Artificial: los datos sintéticos permiten prescindir del uso de información de usuarios reales durante el testado de los modelos, la etapa en la que se prueba su eficacia.

2. La carrera por los chips

Nuevas innovaciones están a punto de cambiar las reglas del juego en el mercado de los chips. Desde los chips 3D hasta los chips in memory-computing. El rápido éxito comercial de la IA en todas las industrias está creando una demanda de hardware especializado que pueda soportar computación y flujos de trabajo intensivos, tanto en centros de datos en la nube como en dispositivos perimetrales como cámaras.

Un mercado al que cada vez se suman más actores y en el que habrá que tener en cuenta también a start-ups como Cerebras Systems, que ofrece ya lo que definen como "el chip más grande jamás construido”, con transistores 2.6T y 850.000 núcleos AI.

3. La protección de los mundos virtuales

Los españoles dedican de media 659,6 horas al año a los videojuegos, casi dos horas al día, y la cifra es aún mayor en Estados Unidos. Allí un 76% de los menores juegan con asiduidad. Ante este escenario, es normal que crezca la preocupación por los contenidos inapropiados que los jugadores puedan encontrar, especialmente los menores de edad.

Para controlarlos, las empresas están usando Inteligencia Artificial para detectar comportamientos dañinos en juegos y otros espacios virtuales, como el metaverso.

Meta gastó 13.000 millones de dólares en moderación de contenido entre 2016 y 2021, mientras que TikTok afirmó en 2020 tener 10.000 personas trabajando en estas labores. La preocupación ya existente en redes sociales se ha trasladado hoy a los videojuegos y mundos virtuales.

4. La lucha contra los 'deepfakes'

En 2022, los deepfakes o falsificaciones no solo han mejorado, sino que se han vuelto accesibles a cualquiera que disponga de un smartphone y un poco de tiempo. La gran cantidad de videos disponibles públicamente y la facilidad para emplear las grabaciones de voz hacen que las personas más famosas sean constantemente dobladas en grabaciones que muchos toman por reales.

Los investigadores advierten que cada vez será más difícil distinguir caras, objetos y vídeos de los reales. La tecnología de detección de deepfakes tendrá que competir con aquella que los crea, y no será una lucha sencilla.

5. Una nueva forma de programar

La Inteligencia Artificial está haciendo que la codificación sea más fácil y eficiente. Los algoritmos están tomando comandos de lenguaje natural y traduciéndolos en código de computadora, señalando una nueva era para el desarrollo de software.

En junio del año pasado, GitHub (adquirida por Microsoft en 2018) y OpenAI (en la que Microsoft posee una participación minoritaria de mil millones de dólares) se asociaron para crear GitHub Copilot. Es un asistente para escribir código basado en Inteligencia Artificial.

No solo te hace pequeñas sugerencias, es una herramienta generativa que intenta predecir qué quieres hacer y te sugiere funciones completas con múltiples variantes. Incluso, puede llegar a escribir código a partir de comentarios que sean definiciones escritas en lenguaje natural de qué necesitas.

6. IA multimodal

Este tipo de Inteligencia Artificial puede comprender conceptos de múltiples modalidades, como video, texto e imágenes 2D, para mejorar la búsqueda y generar contenido. Es el conocido caso de DALL-E, que genera imágenes basadas en un mensaje de texto.

Hasta ahora, una Inteligencia Artificial con imágenes era capaz de generar imágenes, y una entrenada con texto podría crear un texto, pero no combinar de forma tan eficiente todos los conceptos.

7. 'End-to-end machine learning'

En el fragmentado mercado de la Inteligencia Artificial, las plataformas que gestionan un proyecto desde el inicio hasta el final emergen como una opción convincente en 2022.

Estos proveedores end-to-end pueden ser una opción más escalable para las empresas que quieren construir sistemas de IA de manera rápida y eficiente. En el cada vez más concurrido espacio de la Inteligencia Artificial, big techs y unicornios seguirán compitiendo por su cuota de mercado si son capaces de ofrecer una gama cada vez más amplia de servicios de IA.

*** Alicia Richart Ramón es general manager de Afiniti.