“Habrá dos tipos de negocios en el siglo XXI: aquéllos que estén en internet y aquéllos que ya no existan". (Bill Gates).
Tras un arranque de año bastante duro para las bolsas, he querido hacer una recopilación de gráficos para tratar de dar un poco de luz a lo que está sucediendo. Las fuentes son Market Radar, Bloomberg, JP Morgan y Goldman Sachs.
El sentimiento del mercado es ahora muy bajista y los inversores parecen asustados, pero aquí hay un buen gráfico para los alcistas.
No es inusual ver una gran caída del mercado durante el año. En los últimos 42 años, el S&P 500 ha tenido rendimientos anuales positivos durante 32 años, a pesar de una caída promedio intraanual del 14%. Las correcciones son parte de los mercados:
Los índices están enmascarando la severidad de la venta masiva actual, ya que la caída de la acción promedio de cada índice es muy superior a la bajada de cada índice en sí mismo. Esto debe a que las acciones no ponderan todas por igual.
El tecnológico Nasdaq cerró el primer mes del año con una caída del 9%. Ha sido el peor comienzo desde 2008:
En los últimos dos años, ha habido una gran expansión de múltiplos a medida que las acciones aumentaban considerablemente.
Muchas empresas han cotizado a valoraciones insostenibles, pero tras la corrección, llegó también la compresión de los múltiplos. El Nasdaq ha vuelto a valoraciones prepandémicas:
De hecho, las acciones tecnológicas no rentables (las que aún no obtienen beneficios) han regresado de la luna, habiendo caído drásticamente por la previsible subida de los tipos de interés.
Las ganancias, en comparación con el nivel previo a la pandemia, siguen siendo grandes, pero no mayores que las del Nasdaq:
Se han producido situaciones absurdas que generan grandes oportunidades, como el hecho de que Facebook haya experimentado la mayor caída en la capitalización bursátil de una sola compañía en un solo día (tras caer un 25% de golpe):
Lógicamente, al igual que siempre, detrás están los hedge funds haciendo operaciones en corto, comprando puts, vendiendo calls, vendiendo futuros, vendiendo a crédito, etc.:
La situación ha sido de tal calibre que hasta la de repente denostada tecnología (adalid del growth) se ha convertido en el único sector (junto al de la energía) recomendado por Goldman Sachs en todas las áreas geográficas (OW = sobreponderar, UW = infraponderar, N = neutral):
Actualmente, todos los ojos están puestos en los bancos centrales y los mercados están asumiendo que serán muy rápidos en el aumento de tipos. Soy un poco escéptico al respecto, sobre todo porque subir tipos para bajar inflación de oferta (petróleo, electricidad…) no sirve para nada.
En cualquier caso, éste es un gráfico interesante que muestra cómo reaccionan las acciones durante los ciclos de ajuste. En general, la reacción es buena, excepto en ciclos rápidos. En esos casos, el S&P 500 no ha tenido muy buenos rendimientos de media:
Ahora mismo, los inversores esperan siete subidas de tipos por parte de la Fed para este año (según los futuros), pero ¿qué tan bueno ha sido el mercado adivinando los movimientos de la Fed? La respuesta es: pésimo.
Creo que la gran oportunidad en el mercado está en la bolsa china tras la debacle de 2021, aunque soy consciente de que no es para todo el mundo. Ahora hay un argumento adicional a favor:
Históricamente, ha habido una correlación positiva entre las acciones de Estados Unidos y China, pero desde hace varios meses, la correlación entre las dos clases de activos es cercana a cero. Esto puede ser muy útil para diversificar la cartera...
La bolsa ha rendido anualmente el doble que la vivienda en los últimos 20 años. Ver gráfico: S&P 500 (7,5%) vs. Homes (3,7%). Pero el inversor en bolsa promedio no ha logrado batir a la vivienda (2,9%). ¿El motivo? Intentar predecir los movimientos de corto plazo en lugar de permanecer quieto invertido:
La bolsa es el único mercado en el que, cuando hay rebajas, la gente sale corriendo y no compra. El rebaño suele comprar cuando todo está arriba (caro) y sale despavorido cuando todo ha caído (barato). Yo estoy aprovechando para comprar. Como dijo alguien anónimo: “Si no sientes miedo en el momento de comprar, es que estás comprando mal”.