Hemos vivido unas turbulencias estos días que nos han hecho reflexionar sobre cuál va a ser el futuro del petróleo. Me gustaría aclarar antes el porqué de haber visto los precios en negativo estos días.
Con la pandemia del Covid-19, en febrero la demanda cayó unos 4 millones de b/d (barriles por día). El pasado mes, se estimó que la demanda había caído en unos 20 millones de b/d. Solo el sector de la aviación redujo su actividad casi el 80%, lo que supone unos 5 millones de b/d. A esto, hay que sumar la caída del tráfico, el colapso, por cuellos de botella en la cadena de suministro, en miles de industrias, el cierre de algunas economías, más el temor de la población (frenando el consumo).
Parece que lo lógico era cortar el grifo y dejar de producir; sin embargo, las cosas no siempre son tan sencillas como nos gustaría. Analicemos los protagonistas, la situación del mercado y los posibles finales. Sin duda tienen que ver sobre lo que va a ser el eje de mi disquisición de lo que creo que puede pasar en un futuro: la bajada tan tremenda que ha tenido la demanda de petróleo durante estos días.
Lo que vimos a principios de semana fue que el precio del futuro del petróleo de entrega en mayo tuvo niveles negativos porque precisamente lo que se negociaba no era el precio del barril en sí, sino un contrato de futuro. ¿Qué significa esto?
Solo el sector de la aviación redujo su actividad casi el 80%. A esto, hay que sumar la caída del tráfico
Los principales operadores de petróleo no suelen comprar el petróleo al contado sino precisamente a través de estos contratos, en base a unas estimaciones de demanda en dicha fecha futura. ¿Qué ocurrió el pasado día 21 de abril? Debemos explicar que cuando alguien compra un futuro sobre el petróleo, está obligado a realizar esa compra en una fecha determinada (en este caso en mayo).
¿Pero qué ocurre si tienes esa obligación, pero no tienes donde almacenar el petróleo, porque todos los almacenes están llenos? Pues que debes vender esos contratos de futuros, pues no tienes la posibilidad de comprar; y es por esto por lo que el precio alcanzó precios negativos, porque los operadores vendieron dichos contratos apresuradamente el día antes de que se terminara su negociación, y como todo mercado responde a la ley de la oferta y la demanda, y nadie quería ese petróleo de entrega en mayo, los tuvieron que vender a cualquier precio, incluso negativo.
¿Qué significaba este precio negativo? Básicamente quería decir, que como no tengo donde almacenar el crudo que tenía comprometido a comprar, incluso pago por que te lleves el petróleo. Porque si llegado el día de la obligación de comprar y no ejecuto la compra, me expongo a fuertes sanciones.
Dicho esto, enlazamos con el hilo de lo que creo que es el problema, que es como ya he expresado anteriormente la falta de demanda de petróleo porque la economía está parada. Pensemos en la de miles de aviones y automóviles que hoy en día están parados sin consumir.
Comparto la opinión del experto y colega, Luis Fernando Utrera, del IEB: "Esta situación es algo que jamás había sucedido antes: shock de oferta y de demanda simultáneamente, en un periodo de tiempo cortísimo y probablemente por más tiempo del que deseamos. Hasta ahora, habíamos bien sufrido shocks de oferta (guerras, por ejemplo) o shocks de demanda (recesiones tipo 2008, por ejemplo), pero nunca ambas a la vez".
Pero creo que lo que está pasando es una situación extraordinaria, y que el mundo del petróleo volverá a una cierta normalidad. Como normalidad me refiero a la situación precrisis, donde el petróleo se movía en una banda entre 40 y 50 dólares. Y digo cierta normalidad, porque creo que hay factores que van a influir ligeramente a la baja en la demanda de petróleo sobre lo que ocurría meses antes de la crisis. El mundo ha entendido que el teletrabajo funciona, y que probablemente los viajes de negocios bajarán significativamente, y por ello sin duda el consumo.
Estamos en una situación extraordinaria y el mundo del petróleo volverá a una cierta normalidad
La demanda estimo que bajará, pero el precio como he dicho se estabilizará entre 40 y 50, porque los productores no se pueden permitir vender por debajo de esos niveles, y no les quedará más remedio que bajar la producción.
A Rusia y Arabia Saudí, porque sus presupuestos nacionales están hechos en base a un petróleo a esos niveles, y a Estados Unidos, porque los costes de extracción de su shale oil aún son altos.
Sin duda lo que ha pasado estos días quedará en la memoria de los operadores, y nos indica sin duda que los tiempos de petróleo sobre los 80 dólares han pasado para siempre, porque además las energías renovables, así como la eficiencia energética, son fenómenos imparables.
*** Javier Niederleytner es profesor del master en Bolsa y Mercados Financieros del IEB.