Carlos Martín Urriza, portavoz económico de Sumar, ha celebrado este lunes la eliminación de las Golden Visa, una medida que su formación perseguía desde mayo de 2023. A pesar de este anuncio, el partido de Yolanda Díaz va ahora más allá: pide prohibir la compra de inmuebles salvo que sean para vivir. 

"Debería continuarse con prohibir una vivienda en la que no se va a vivir como pasa en Canadá y Ámsterdam", ha señalado Martín Urriza a través de Twitter, detalla Europa Press. 

La norma, aprobada por el Partido Popular en el año 2013, ha beneficiado a algo más de 6.000 extranjeros. España sigue de este modo el ejemplo de países como Portugal o Reino Unido, que ya habían eliminado este privilegio para los inversores extranjeros. 

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Según informes a los que ha tenido acceso EL ESPAÑOL-Invertia, apenas el 1% de los inversores extranjeros se verían afectados por esta medida. Así lo detalló la Asociación Española de Personal Shoppers Inmobiliarios en un documento remitido a la prensa el pasado mes de mayo.

Así, a pesar de que el mercado de lujo en España ha ganado relevancia durante los últimos años, lo cierto es que la incidencia de las Golden Visa en el mismo ha sido de carácter menor. 

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Además de por compras de inmuebles superiores al medio millón de euros, se puede acceder a una Golden Visa a través de una inversión de 2 millones de euros en deuda pública. 

El Ministerio de Vivienda tiene como prioridad para esta legislatura garantizar el acceso a la vivienda a cualquier ciudadano. Todo ello, bajo un contexto muy complicado. El alquiler marca máximos históricos en los grandes mercados y las promociones de vivienda nueva avanzan a un ritmo mucho más lento del requerido. 

Ambas situaciones, junto con el encarecimiento de la financiación derivado del alza de los tipos de interés, han generado un cuello de botella en el mercado que cada vez hace más complicado el acceso a la vivienda. 

En lo que va de año, tal y como contó EL ESPAÑOL-Invertia, las diez ciudades más pobladas del país han batido su récord de precio en alquier. Además, en algunos barrios del centro de las grandes ciudades, como Madrid o Barcelona, el precio de la vivienda en propiedad ha alcanzado niveles prohibitivos, por encima de los registros de la burbuja inmobiliaria.