Soltero busca casa: con un solo salario ya no se puede comprar un piso en más de la mitad de España
El desfase entre precios de la vivienda y sueldos cierra el paso a los singles. Tener pareja es clave salvo en Madrid y Baleares, donde ni aún así se llega.
11 octubre, 2023 03:07Cuando llevaban un mes viéndose, Curro le propuso a la chica con la que salía irse a vivir juntos. "Me gustaba mucho, pero también era una buena forma de ahorrar y pillar un piso, que yo solo no podía". Ella le dijo que no, para año y medio después decirle que sí. En ese tiempo han constatado que se quieren, pero también que él tenía razón: ahora suman una capacidad adquisitiva vital para poder comprar un piso.
Curro vive en Andalucía, pero la posibilidad de que pudiera ser propietario en solitario sería remota en realidad en más de la mitad de España. Lo constata un análisis del HelpMyCash: un soltero que cobra el salario medio no puede permitirse la compra en la mayoría del territorio "porque con su sueldo no puede pagar las cuotas de la hipoteca".
El informe llega a esta conclusión tras comparar los salarios medios en cada comunidad autónoma con el precio medio de la vivienda en cada región. No da para comprar en solitario en Andalucía, Aragón, Cantabria, Cataluña, Galicia, Islas Baleares, Islas Canarias, la Comunidad de Madrid, Navarra, País Vasco y la Comunidad Valenciana.
En el caso de Madrid, donde el sueldo medio se sitúa en 1.788 euros netos al mes, un soltero puede asumir la compra de un piso que cueste un máximo de 149.317 euros. Sin embargo, la vivienda media allí cuesta 311.425,60 euros, "muy por encima de lo que se podría permitir".
En el caso de Cataluña, donde el sueldo medio de la comunidad asciende a 1.688 euros netos al mes, el límite está en 140.966 euros. En este caso se nota más lo lejos que tiene la posibilidad de ser propietario: el precio medio de la vivienda se sitúa en 225.876,20 euros.
En Andalucía, con salario medio de 1.450 euros, podrá comprarse un piso de hasta 121.000 euros; en Valencia, con 1.517 euros, hasta 144.939 euros.
En el extremo contrario, se descubre que los singles desahogados son extremeños y castellano-manchegos: a un extremeño, que con 1.283 euros de salario puede pagar un piso de hasta 107.144 euros, le sobraría un margen de 20.000 euros puesto que la vivienda media cuesta 88.000; aproximadamente el mismo margen que tiene un manchego.
Pisos más pequeños
Ante semejante desajuste, existe la opción de buscar casas más pequeñas en la esperanza de que entonces sí pueda asumirse la hipoteca. Es una idea que explora el estudio, aunque tampoco así hay resultados esperanzadores en las zonas más pobladas de nuestro país.
Incluso si se opta por una vivienda 80 metros -superficie que suele equivaler a dos habitaciones-, el paso a solteros está cerrado en Andalucía, Cataluña, Islas Baleares, Islas Canarias, Madrid, Navarra y País Vasco.
Porque en Madrid un piso de esas dimensiones cuesta de media 263.920 euros -unos 113.000 euros más del máximo que podría permitirse un soltero-; en Cataluña son 197.920 euros -57.000 euros más del máximo- y en Andalucía, 132.240 euros -21.000 euros más que el máximo-.
Tener pareja no ayuda en Madrid y Baleares
El complejo panorama rema a favor de quienes pueden sumar dos sueldos: otra perspectiva para edificar el amor en los tiempos del Euríbor al 4%. Con esta solución ya es posible comprar un piso en casi toda España: escapan Madrid y Baleares.
Dos sueldos en Madrid suman 3.575 euros. Pueden como máximo comprar una vivienda de 298.500 euros; pero es que la vivienda media cuesta 311.425 euros. En Baleares el golpe es mucho mayor. La pareja sumaría 3.192 euros que le permitirían aspirar a una casa de unos 266.600 euros; muy lejos de la media, que está en unos 348.400 euros.
A todos estos cálculos, sin embargo, conviene no olvidar que se suma los ahorros que deben tener quienes se lancen a comprar casa. En general, hay que tener el 30% del precio de la vivienda: un 20% para pagar la entrada y un 10% para abonar los impuestos y gastos de formalización.
Una tarea que, lógicamente, es más compleja cuanto mayor sea el importe de las casas. O dicho de otra manera: es más difícil, ya sea solo o emparejado, ser propietario en Baleares, Madrid, País Vasco o Cataluña.