La vicepresidenta primera del Gobierno y responsable de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha admitido este lunes que persisten puntos de bloqueo en la Ley de Vivienda, que durante toda la legislatura ha enfrentado al PSOE y Unidas Podemos por la cuestión del control de los alquileres. No obstante, Calviño se ha mostrado convencida de que habrá un acuerdo "pronto" con los "distintos grupos parlamentarios" para sacar adelante la norma.
Fuentes cercanas a las negociaciones sostienen que ya existe un "principio de acuerdo" entre la ministra de Transportes, la socialista Raquel Sánchez, y la responsable de Derechos Sociales, Ione Belarra, secretaria general de Podemos. Y que la norma está pendiente únicamente del visto bueno de Calviño.
La vicepresidenta primera ha eludido entrar en detalles sobre la negociación de la Ley de Vivienda y se ha limitado a señalar que "todavía quedan algunas cuestiones sobre las que se está trabajando", sin explicar cuáles son las discrepancias que mantiene con Unidas Podemos. "Yo espero que pronto tengamos ya un texto que pueda culminar el proceso legislativo", ha afirmado a su llegada a la reunión del Eurogrupo en Bruselas.
"Se ha estado trabajado muy bien. Hemos avanzando muy bien y quedan cada vez menos temas que tenemos que terminar de perfilar con los distintos grupos parlamentarios para que cuanto antes podamos tener ya terminado el procedimiento parlamentario y legislativo y esa nueva Ley de Vivienda", sostiene Calviño.
La vicepresidenta primera ha asegurado que "la política de vivienda ha sido una de las prioridades desde que llegamos al Gobierno en 2018" y que el Ejecutivo ya ha puesto en marcha "muchas" medidas. No sólo iniciativas de carácter legislativo, sino también "importantes inversiones en todo el territorio para impulsar la construcción, la renovación de vivienda y sobre todo recuperar un parque de vivienda social que se vio desmantelado durante los Gobiernos anteriores".
"En este sentido, estamos utilizando todos los instrumentos y también aprovechando los fondos europeos Next Generation para impulsar este acceso a la vivienda en condiciones adecuadas, sobre todo pensando en los jóvenes", afirma Calviño.
La vicepresidenta primera ha defendido además la necesidad de una "mejora generalizada de los niveles salariales de los trabajadores en toda España". "Desde el Gobierno consideramos que hay que mejorar el nivel salarial y las condiciones laborales del conjunto de los trabajadores españoles, y en esa línea se produce el aumento del salario mínimo interprofesional que precisamente vamos a adoptar mañana en el Consejo de Ministros", ha indicado.
Este incremento situará el SMI en los 1.080 euros en 14 pagas, "cumpliendo así el compromiso del Gobierno de alcanzar el 60% del salario medio en nuestro país". Un aumento que según Calviño está muy cerca del 50% desde su llegada al Gobierno y "mejora las condiciones laborales y las condiciones de vida de los trabajadores más vulnerables, muy especialmente mujeres y jóvenes".