El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado este lunes el proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (PERTE) “Salud de vanguardia”, uno de los proyectos incluidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y que movilizará 1.469 millones de inversión pública y privada entre 2021 y 2023.
El propio Sánchez ya anunció el pasado 19 de mayo que este sería el segundo PERTE que el Ejecutivo llevase al Consejo de Ministros, después del proyecto del vehículo eléctrico. Lo hará "en las próximas semanas", ha asegurado.
Según las cifras que ha aportado Sánchez, de los 1.469 millones de euros, más de 982 millones provendrán del sector público mientras que 487 millones serán del sector privado.
"Es un compromiso público del Gobierno de España por hacer de la salud una enorme palanca de crecimiento", ha dicho el presidente del Ejecutivo durante su intervención.
El objetivo del PERTE presentado este lunes es "reforzar nuestro Sistema Nacional de Salud y posicionar a España como líder en la innovación y desarrollo de terapias avanzadas".
Es decir, "se trata de aprovechar la oportunidad que nos brindan los fondos europeos para apostar por la ciencia, el Sistema Nacional de Salud y por una recuperación económica, que sea justa mediante la colaboración pública y privada".
"Debe mantenerse como prioridad el tratamiento, el diagnóstico… pero hay que ir más lejos y estar a la vanguardia. Estar a la vanguardia significa que nuestro sistema sanitario llegue a todas las personas", ha continuado Sánchez.
Por su parte, la ministra de Ciencia, Diana Morant, ha señalado que "hay impulsar la ciencia e innovación como instrumentos para mejorar el sistema".
España "ya era reconocida por la calidad de las prestaciones sanitarias, pero ahora queremos seguir avanzando y dar un gran salto cualitativo centrándonos en cada persona. Una atención sanitaria a la medida de cada ciudadano", ha añadido.
Cuatro objetivos y cinco líneas estratégicas
El PERTE está compuesto por cuatro objetivos y las cinco líneas estratégicas, tal y como ha adelantado EL ESPAÑOL-Invertia.
Como objetivos estratégicos para este PERTE, uno de los principales será "impulsar la implementación equitativa de la Medicina Personalizada de Precisión en el Sistema Nacional de Salud". A este se suma "promover el desarrollo de terapias avanzas y otros fármacos innovadores o emergentes y facilitar su transferencia a la práctica clínica".
Para ello, se tejerán las alianzas necesarias entre los sectores académico y empresarial, y se buscará el fortalecimiento del tejido industrial. Como tercer objetivo surge el desarrollo de "un sistema de datos innovador" y como cuarto "impulsar la transformación digital de la asistencia sanitaria", incluyendo la Atención Primaria y poniendo el foco en la ciberseguridad.
Por otro lado, la primera de las líneas transversales de estos objetivos será fortalecer y desarrollar las capacidades del Sistema Nacional de Salud, sobre todo en el campo de investigación clínica y "para retener las inversiones de las empresas farmacéuticas internacionales".
A continuación, se pretende invertir en el desarrollo, digitalización y modernización de la capacidad industrial para facilitar la orientación de las cadenas de producción "hacia la innovación diagnóstica, terapéutica y rehabilitadora". La idea es "aumentar" la autonomía industrial de España.
También se incluye el diseño y despliegue de instrumentos y estructuras que aseguren la colaboración y la coordinación entre el tejido científico y el empresarial "en toda la cadena de valor", de los productos innovadores.
Por otro lado, para favorecer la "cohesión territorial" se incorporará a todas las comunidades autónomas al PERTE. Finalmente, se fortalecerá "la formación partiendo de la alianza entre las empresas, los centros del Sistema Nacional de Salud y los centros de investigación".