España atraviesa una segunda ola de contagios de Covid-19. De hecho, ya ha superado la barrera del millón de casos desde el inicio de la pandemia. Esta situación también se ha trasladado a las farmacias, que han registrado un aumento del 41% en su facturación por la venta de geles hidroalcohólicos.
El uso de estos productos es una de las medidas de higiene recomendadas por las autoridades sanitarias para evitar nuevos contagios. Con la llegada de la segunda ola de la Covid-19, la sociedad ha vuelto a comprar los geles hidroalcohólicos, elevando los ingresos de las farmacias hasta los 6,5 millones de euros en septiembre.
Esto supone un incremento de casi dos millones de euros con respecto a agosto, cuando la facturación se situó en 4,6 millones, según los datos facilitados por Iqvia. Marzo, abril y mayo fueron los meses en los que más aumentaron las ventas de los geles hidroalcohólicos, coincidiendo con el inicio de la crisis sanitaria.
Una persona echándose gel hidroalcohólico sobre las manos.
Desde el principio de 2020, las ventas de estos geles se han multiplicado por 10, pasando de una facturación de 613.000 euros en enero a 6,5 millones en septiembre.
España también depende de proveedores extranjeros en la adquisición de los geles desinfectantes de manos. En este caso, es menor que con las mascarillas -llegaba hasta el 96%-, pero el 57% de los ingresos de las boticas por estos productos provienen de empresas que operan fuera de nuestro país.
Termómetros
La fiebre es uno de los síntomas asociados a la Covid-19 y, precisamente esto, es lo que ha incrementado las ventas también de los termómetros. Según los datos de Iqvia, la sociedad se decanta más por los digitales que por los de cristal.
De agosto a septiembre, las farmacias han notado un aumento de casi un millón de euros en la facturación por la venta de termómetros (digitales y de cristal). En septiembre, los ingresos se situaron en 3,7 millones, de los que 3,5 proceden de los digitales y 177.000 de los de cristal.