El Ministerio de Sanidad ha decidido restringir el acceso comercial uno de los fármacos que se están probando en ensayos clínicos contra el Covid-19. Se trata de la hidroxicloroquina, un antipalúdico (un producto contra la malaria que también se utiliza contra la artritis o el lupus) que podría ser el ‘grial’ para poner coto a la pandemia.
Su demanda se ha disparado y, en cambio, su stock es limitado. Estas son las principales razones que llevan a que se controle exhaustivamente su venta. Concretamente, la Agencia de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha dado la orden de que las compañías farmacéuticas que comercializan este medicamento en España (la más importante, la multinacional israelí Teva) no distribuyan más unidades en el canal comercial hasta nuevo aviso.
Toda la hidroxicloroquina presente en España “se pondrá a disposición de las autoridades competentes de las comunidades autónomas en materia de la prestación farmacéutica para dedicarlo a dispensaciones de continuación en pacientes crónicos bajo las indicaciones autorizadas”, como el lupus o la artritis reumatoide.
De esta manera, las regiones arbitrarán un sistema de control para garantizar que este fármaco llegue a estos pacientes que lo necesitan por el uso aprobado y vigente que ahora tiene y que el sobreempleo que se está haciendo de este medicamento por la pandemia no provoque que se queden sin su dosis.
También se priorizará su uso para ensayos clínicos y para el tratamiento de pacientes ingresados con neumonía. “No se aconseja iniciar tratamientos en otro tipo de situaciones clínicas fuera del contexto de ensayos clínicos autorizados”, precisa la agencia.
Altas expectativas
Y es que este fármaco, que se está probando en numerosos ensayos clínicos contra el coronavirus, ha generado altas expectativas de que acabe siendo eficaz, de modo que distintos países como Italia, Francia, China o España han incluido la cloroquina o la hidroxicloroquina como una de las alternativas de tratamiento en pacientes con infección por COVID -19.
Así lo indica la Aemps, que en una nota informativa admite los buenos resultados preliminares que están reflejando los ensayos clínicos en la capacidad de la cloroquina (concretamente en su presentación como hidroxicloroquina) para desactivar el virus. Todo ello con un producto que ya no está protegido por patente y a un precio de 7,79 euros por 30 comprimidos.
Sin embargo, la propia Aemps llama a la calma. El citado ensayo solo incluyó 42 pacientes con infección por Covid-19, 20 pacientes tratados con hidroxicloroquina sola o hidroxicloroquina en combinación con azitromicina (N = 6) y 16 pacientes sin tratamiento.
La proporción de pacientes con carga viral negativa de coronavirus a los seis días de tratamiento fue del 57% en el grupo de hidroxicloroquina, del 100% en el grupo de hidroxicloroquina con azitromicina y del 12.5% en el grupo sin tratamiento. Sin embargo, a uno de los pacientes tratados con hidroxicloroquina y azitromicina se volvió a detectar presencia viral en el octavo día de tratamiento.
“Se debe tener en cuenta que se trata de los resultados observados en un número muy limitado de pacientes y que el estudio presenta muchas limitaciones. Por tanto, es necesario generar más evidencia al respecto”, avisa la agencia.