Javier Marín, consejero delegado de Singular Bank.

Javier Marín, consejero delegado de Singular Bank. SB

Fondos de inversión

Singular se lleva a una de las banqueras más antiguas del Santander con una cartera de 300 millones de euros

Fátima Parreño Santa-Olalla llevaba trabajando desde 1998 para el banco cántabro en Madrid, el caladero favorito de Javier Marín.

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Fichaje con solera. Singular Bank ha incorporado a sus filas a una de las banqueras privadas más antiguas y relevantes de Santander en la capital. Javier Marín vuelve a ‘pescar’ en su antigua casa y esta vez ha sido Fátima Parreño Santa-Olalla quien ha dado el salto como directora de gestión de patrimonios en Madrid.

Parreño llevaba trabajando para el grupo cántabro desde 1998. En estos 23 años, ha pasado por diversos puestos directivos. De 2012 a 2016, fue la directora del servicio Santander Asesora y, entre 2014 y 2016, también dirigió el departamento de Fondos de Inversión, liderando un equipo de seis analistas cuya función era la selección de la gama de fondos para Santander Private Banking.

Siempre ha estado ligada a los grandes clientes de la casa, tanto en Banif como en la etapa moderna de Santander PB. En su cartera, estimada en más de 300 millones de euros por varias fuentes de su entorno, hay consejeros delegados, altos directivos de empresas cotizadas, family offices y ejecutivos del propio Banco Santander.

Más fichajes y crecimiento de Belgravia

Esta banquera empezó su carrera en el año 1992. Antes de llegar al Santander, trabajó para Ahorro Corporación Financiera, MEFF, Aberdeen y Siaga.

Este fichaje se une a los que ha llevado a cabo recientemente Singular en Málaga, caso de Sonia Medina Infante, Ángel García y Jesús Martín. Los tres provenían de Santander PB, el caladero favorito de Marín. También se ha sumado en Zaragoza el banquero Ángel Mínguez Gimeno, desde Ibercaja Banca Privada.

El banco privado que Marín y el capital riesgo Warburg Pincus están desarrollando empieza a coger ritmo. Sin ir más lejos, los fondos Belgravia han doblado su patrimonio y acumulan una rentabilidad del 30% desde el acuerdo de compra de la gestora con la entidad bancaria.