Los inversores que tradicionalmente han elegido la opción de canalizar sus ahorros hacia activos capaces de generar una renta periódica optaban habitualmente por un activo de renta fija para lograr su objetivo. Sin embargo, como consecuencia de la política de tipos de interés muy reducidos, e incluso negativos, los inversores se ven obligados a buscar alternativas capaces de ofrecer un nivel razonable de ingresos regulares a partir de su inversión.
Una de las opciones que puede considerarse es la inversión en fondos de dividendos. Ofrecen la oportunidad de obtener rendimientos atractivos con una orientación relativamente defensiva. Aunque la rentabilidad por dividendo no es el factor más importante a la hora de decantarse por uno u otro valor; es importante asegurarse de que sean compañías con un modelo de negocio de éxito, no sólo a corto sino a largo plazo.
Para ello, conviene prestar especial atención a la sostenibilidad de los dividendos y la calidad de las acciones, diversificar por sectores, zona geográfica y volumen de capitalización y centrarse en modelos de negocio con grandes barreras de entrada, incluyendo empresas de pequeña y mediana capitalización, particularmente las familiares.
Del grupo de fondos que centran su inversión en compañías con dividendos atractivos, que cuentan con la calificación cinco estrellas de VDOS y requieren una aportación mínima requerida de 6.000 euros o menos, uno de los más rentables en el año es BL-Equities Dividend BI, que obtiene una rentabilidad del 26,6% en lo que va de año en su clase de capitalización con cobertura en dólares. A un año, se revaloriza un 22,9% con un controlado dato de volatilidad del 12,7% en ese periodo, lo que lo sitúa en el segundo mejor grupo de su categoría por tal concepto, en el quintil cuatro. Referenciado al índice MSCI AC World NR, se propone como objetivo obtener una plusvalía sobre el capital a largo plazo, invirtiendo al menos un 75% de sus activos compañías internacionales con un dividendo estimado elevado, bien en el momento de la inversión o hacia futuro. No se consideran limitaciones geográficas, sectoriales ni de divisas, seleccionándose las compañías en función de su calidad intrínseca y de su valoración.
Gestionado por Banque de Luxembourg Investments, cuenta con un patrimonio bajo gestión de 459 millones de euros. Sus mayores posiciones en cartera corresponden a Unilever (8,06%), PepsiCo (5,61%), Philip Morris International (4,93%), Colgate-Palmolive (4,59%) y Givaudan (4,38%). Las comisiones aplicadas a los partícipes de este fondo suponen un 0,6% en concepto de comisión fija o de gestión y del 0,06% de depósito.
De la gestora M&G International, la clase A de acumulación en euros de M&G (Lux) North American Dividend Fund se revaloriza un 23,8% en el año. En el último periodo anual registra un dato de volatilidad también bastante controlado del 17,7% (quintil cuatro) y obtiene una rentabilidad del 14,4%. Toma como referencia de gestión el índice S&P 500, proponiéndose como objetivo maximizar la rentabilidad total por medio de la combinación de crecimiento del capital y rendimientos. El gestor centra su inversión en compañías norteamericanas de cualquier sector y capitalización con potencial para ofrecer dividendos crecientes a largo plazo.
Gestiona un patrimonio global de 149 millones de euros e incluye entre sus mayores posiciones acciones de Microsoft (6,6%), Comcast (5,7%), Constellation Brands (4,4%), Mondelez International (4,2%) y Fidelity National Information (4,1%). La suscripción de este fondo requiere una aportación mínima de 1.000 euros y aplica a sus partícipes una comisión fija del 1,5% y un 0,41% de comisión de depósito.
Con un enfoque de inversión global, la clase D de acumulación en dólares de JPM Global Dividend se revaloriza un 22,8% en lo que llevamos de año y un 17,9% a un año, con un dato de volatilidad en este último periodo de 15,5%. Se propone como objetivo proporcionar un crecimiento del capital a largo plazo, invirtiendo al menos un 67% del patrimonio en compañías de todo el mundo que generen unos ingresos elevados y una creciente rentabilidad por dividendo. Toma como referencia de gestión el índice MSCI All Country World (Total Return Net), sumando un patrimonio total bajo gestión de 207 millones de dólares (aproximadamente 186 millones de euros).
La cartera final es una cartera concentrada de entre 40 y 90 compañías, que incluye entre sus mayores posiciones acciones de Microsoft (3%), Coca-Cola (2,8%), Comcast (2,7%), Chevron (2,7%) y Nextera Energy (2,6%). La inversión en la clase D de acumulación en dólares de este fondo requiere una aportación mínima de 5.000 dólares (aproximadamente 4.500 euros) y aplica a sus partícipes una comisión fija del 1,5%.
Puesto que parece bastante poco probable que haya cambios en la política monetaria en un futuro cercano y que, por tanto, parece previsible que los dividendos vayan a mantenerse por encima de los tipos de interés, el escenario puede resultar propicio para aumentar el peso de la renta variable en cartera. Sin olvidar que, aun cuando este tipo de fondos puedan remplazar las rentas periódicas que tradicionalmente se obtenían de los pagos de cupón de los bonos, su nivel de riesgo es, por lo general, más elevado.
*Paula Mercado es directora de análisis de VDOS