El Ibex 35 ha firmado su quinta semana consecutiva al alza con una subida del 2,03%, con la que ha alcanzado los 10.140,8 puntos. Aunque tocó los 10.100 enteros tanto en la sesión del jueves como a mediados de febrero de 2020, es la primera vez que el selectivo logra cerrar por encima de dicha cota desde mayo de 2018.

Así, el Ibex 35 inicia diciembre con la misma tendencia positiva con la que cerró noviembre. El undécimo mes del año se saldó con un avance del 11,54%, el más abultado desde noviembre de 2020, cuando los parqués de todo el mundo celebraron la eficacia de las vacunas contra la Covid-19.

De esta forma, a falta de un mes para que termine el año, la subida que el Ibex 35 acumula en 2023, del 22,23%, es la más elevada desde la registrada en 2009. Entonces el repunte fue del 29,84%.

Recupera los 10.100 puntos

Sólo el repunte de este viernes ha sido del 0,82%, suficiente para alcanzar los mencionados 10.140,8 puntos. Los mayores repuntes del índice nacional han sido las de IAG (+2,59%), Meliá (+2,22%) y Solaria (+1,85%), mientras que los principales descensos los han protagonizado Fluidra (-0,9%), Grifols (-0,69%) y Redeia (-0,52%).

Las bolsas europeas también han terminado al alza una sesión marcada por la publicación los índices de actividad de los sectores manufactureros de las principales economías del mundo -los conocidos como PMI-, y por las declaraciones del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Jerome Powell.

[Así ha sido la sesión bursátil de este viernes]

Respecto a la primera cuestión, esta madrugada la agencia de medios china Caixin ha publicado su PMI manufacturero de China de noviembre, índice que, por primera vez desde el mes de agosto, ha indicado expansión mensual de la actividad en el país asiático.

Por el contrario, la pérdida de actividad de las fábricas de la zona euro continuó en noviembre, aunque fue inferior a la sufrida en el mes anterior. Exactamente, el PMI se situó en 44,2 puntos, frente a los 43,1 de octubre, acumulando así 17 meses consecutivos por debajo del umbral.

El PMI manufacturero de Estados Unidos, que ofrece el Institute for Supply Management (ISM) se situó por segundo mes consecutivo en los 46,7 puntos.

El relativo enfriamiento económico y la moderación de la inflación -se redujo al 2,4% en la eurozona- han llevado a los mercados a estimar que las bajadas de los tipos, tanto por parte de la Fed como del Banco Central Europeo (BCE) podrían dar inicio el próximo mazo.

Bajadas de tipos

Hace sólo unos días, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, avisó de que la economía de la eurozona ha entrado en una fase de estancamiento y se mantendrá débil durante el resto del año.

Al mismo tiempo, Lagarde insistió en que todavía es pronto para cantar victoria en la lucha contra la inflación, cuya evolución a medio plazo sigue rodeada de "considerable incertidumbre".

Este viernes ha sido el presidente de la Fed quien ha advertido de que sería "prematuro especular sobre cuándo podría flexibilizarse la política monetaria", es decir, bajar los tipos de interés, al mismo tiempo que ha reiterado que el banco central subirá más las tasas si fuera necesario. 

Sin embargo, ha señalado que el Comité de Mercado Abierto de la Fed (FOMC, por sus siglas en inglés) "está avanzando con cuidado".

Tras las palabras del banquero central el Dow Jones -que había superado los 36.000 puntos por primera vez desde enero de 2022- ampliaba las subidas y el S&P 500 se giraba al alza. A pesar del recorte del Nasdaq, los principales índices de Wall Street también se aproximaban a cerrar la quinta semana consecutiva al alza.

Más allá de los datos de inflación y las declaraciones de los principales banqueros centrales, la semana ha estado marcada por la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios, grupo conocido como OPEP+.

Reunión de la OPEP+

La alianza decidió este jueves que los niveles de los suministros petroleros se ajustarán el próximo año con recortes "voluntarios" de la mayoría de sus socios, como los que extienden Riad y Moscú hasta el 31 de marzo de 2024.

Ese es el resultado de la teleconferencia celebrada por los ministros de Energía y Petróleo de los 23 países integrantes del grupo, un encuentro convocado inicialmente para el domingo pasado en Viena y que fue luego aplazado, aparentemente debido a desavenencias internas.

Los precios del petróleo reaccionaron al encuentro con descensos. Sin embargo, se aproximaban a cerrar la semana al alza tras haber sufrido seis caídas semanales consecutivas.

El precio del petróleo Brent, la variante de referencia en Europa, escalaba por encima de los 81 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) estadounidense superaba los 76 dólares.