Los principales índices de Wall Street iniciaban la sesión con tendencia mixta después de que la alianza OPEP+ confirmara un recorte de 1,66 millones de barriles diarios a partir de mayo. La escala del precio de esta materia prima aumentaba los miedos a la inflación, lo que lastraba el comportamiento del Nasdaq.

Así, el índice tecnológico se dejaba un 0,28%, hasta los 12.189,75 puntos; mientras que el Dow Jones subía un 0,87%, hasta los 33.564,57 puntos, y el S&P 500, un 0,23%, hasta los 12.187,61 puntos.

La mayor subida del Dow Jones era la de Chevron, que repuntaba un 4,24%. La petrolera se veía beneficiada por la escalada del precio del petróleo West Texas Intermediate (WTI), que se disparaba en la apertura de este lunes un 6,01%, hasta 80,22 dólares por barril.

El crudo de referencia estadounidense, que la semana pasada se revalorizó más de un 9%, gracias al desvanecimiento de las preocupaciones sobre el sector bancario y a una posible recesión. Logró así recuperar la cota de los 70 dólares que había perdido durante la breve crisis financiera, se disparó este lunes tras el recorte inesperado anunciado por los países productores de petróleo.

La alianza OPEP+ confirmó este lunes, tras celebrar una teleconferencia de su comité interno, que, a partir de mayo, retirará del mercado 1,66 millones de barriles diarios (mbd) mediante recortes "voluntarios" de varios de sus socios.

En un comunicado recogido por Efe, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) alude a sendas e inesperadas decisiones comunicadas por varios países ya el domingo, sobre nuevas limitaciones de la oferta petrolera que han impulsado con fuerza el precio del crudo.

Esas reducciones, que totalizan 1,16 mbd, se suman a una rebaja de 0,5 mbd anunciada previamente por Rusia, que el domingo también avisó de que la extenderá hasta fin de año. En octubre de 2022, el grupo de 23 países que integran el organismo acordó un fuerte recorte de 2 mbd.

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"Se puede esperar que tenga un impacto al alza en el IPC general y subyacente... lo que potencialmente significa una tasa terminal más alta para la Reserva Federal (Fed) y que los tipos permanezcan en un nivel elevado durante más tiempo que hasta ahora", advierten los analistas de Equiti Capital en una nota recogida por Reuters.

Esas expectativas de una mayor inflación se hacían notar en la rentabilidad de la deuda estadounidense. El interés del bono de Estados Unidos a dos años repuntaba al 4,08%, mientras que el del 10 años se situaba en el 3,48%.

A su vez, este incremento pesaba sobre la cotización de las grandes compañías tecnológicas y empresas como Apple, Amazon o Microsoft cedían entre un 0,6% y un 0,09%. También sufría Tesla, que bajaba un 2% después de incumplir las estimaciones de entregas del primer trimestre.

Según datos de Refinitiv, los inversores daban una posibilidad del 58,7% a que la Fed eleve los tipos de interés 25 puntos básicos en la reunión que la institución celebrará a principios de mayo. Al mismo tiempo, las probabilidades de una pausa se reducían al 41,3%.

Salud bancaria

En cualquier caso, Wall Street parecía dejar atrás el temor por la salud bancaria tras el colapso de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank y las medidas de emergencia de las autoridades. En el acumulado de marzo, el Dow Jones ganó un 1,87%; el S&P 500, un 4% y el Nasdaq, un 7,40%.

Asimismo, los principales índices del parqué neoyorquino cerraron el primer trimestre al alza. El Nasdaq ascendió un 16,8% en la que fue su mayor subida trimestral desde 2020; seguido del S&P 500, que ascendió un 7,03%; y del Dow Jones, que se anotó un 0,38%.

Pese a la volatilidad reciente, este viernes terminó con un tono positivo tras publicarse el índice de gasto de consumo personal en Estados Unidos, un indicador de la inflación muy seguido por el banco central a la hora de decidir su política monetaria, que fue algo mejor de lo esperado.