La plataforma de criptomonedas FTX ha anunciado que ha pedido acogerse al proceso de bancarrota en Estados Unidos y que su fundador y máximo responsable, Sam Bankman-Fried, ha dimitido.
La decisión confirma el colapso total de esta plataforma, una de las más importantes del sector, que llegó a estar valorada en 32.000 millones de dólares y que en los últimos días se ha venido abajo por falta de liquidez y con los usuarios apresurándose a retirar sus fondos.
En un comunicado, FTX asegura que la declaración de bancarrota es la medida adecuada para gestionar los activos de la compañía y proteger los intereses de sus accionistas.
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Las autoridades de Bahamas, donde tiene su sede, habían congelado los activos de algunas filiales. Y la SEC de EEUU (el equivalente a la CNMV en España) había abierto una investigación sobre el fundador, Bankman-Fried, por posibles violaciones de la ley del mercado de valores.
La caída de la plataforma se ha precipitado después de que Binance anunciara que salía al rescate de FTX comprando su negocio, aunque menos de 24 horas después se desdijo y renunció a tal adquisición, lo que empeoró su situación.