¿Qué esperar tras la curva de tipos invertida?
Este hecho históricamente se ha presentado como la antesala a un periodo de recesión aunque con un margen de meses para maniobrar.
3 abril, 2022 13:21Noticias relacionadas
Los políticos están generando una economía drogodependiente de los estímulos continuos en donde los modelos económicos convencionales ya no funcionan. Mientras que países como Japón y China ya han aprendido a respetar la deflación, en EEUU se encuentran ahora ante una divergencia extrema entre inflación o crecimiento y en Europa vivimos una arrogancia extrema ante una total desinformación del final del ciclo.
Muchos directores ejecutivos de ventas están encantados de impulsar la hipótesis del asentamiento de la estanflación para obtener beneficios récord. La estanflación es una llamada a comprar de todo: bienes duraderos, automóviles, casas, acciones, criptomonedas, oro...
Nuestros gobernantes también piensan que la única inflación nociva es la inflación salarial y por ahora prefieren estar felices haciendo la vista gorda ante la especulación desenfrenada. Y ahí es donde radica su punto ciego.
No son capaces de ver al consumidor al borde del colapso mientras los precios de absolutamente todo se disparan hasta niveles nunca vistos.
Pero lamentablemente, nada de lo que estamos viendo en esta orgía de consumo de fin de ciclo es sostenible en el medio plazo y nos está llevando hacia unos niveles de sentimiento del consumidor no vistos desde la crisis anterior y sospecho que muy pronto se marcarán nuevos mínimos tal y como podemos ver en el siguiente gráfico.
Por otro lado, con el cierre del trimestre hemos asistido a la inversión de la curva de tipos en los bonos estadounidenses. Esto significa que el mercado ve real la nueva etapa de la Fed de un endurecimiento más rápido y brutal de los tipos de interés.
Sin embargo, muchos inversores están tranquilos e incluso son optimistas porque piensan, echando la mirada atrás a otras situaciones similares, que al ponerse los tipos de corto plazo por encima de los de largo todavía existe un periodo de gracia de unos doce meses antes de entrar en recesión.
Lo que desconocen estos inversores es que el riesgo de caída de todos los activos va a hacer que ese plazo de 12 meses se vea reducido de manera importante.