Wall Street se descuelga de su enésimo triple récord histórico. Los índices neoyorquinos de referencia se tiñen del rojo de las pérdidas a consecuencia de la incertidumbre que siguen generando los últimos cambios regulatorios en China, que amenazan especialmente el sector tecnológico. Una circunstancia que anima a muchos inversores a asegurar las ganancias obtenidas en la víspera.
Las últimas reformas normativas iniciadas por Pekín apuntan hacia un marcaje cada vez más estrecho sobre el sector tecnológico, tan importante para la economía estadounidense. Por si fuera poco, estas novedades llegan justo a tiempo de provocar el enrarecimiento de la próxima ronda de negociación comercial entre EEUU y China.
Un contexto en el que los índices se toman un alto en el camino después de haber conseguido dar carpetazo finalmente a los retrocesos en la jornada del lunes. El Dow Jones cede un 0,5% hasta los 34.900 puntos. Un 0,6% se deja el S&P 500, que vuelve a perforar los 4.400 puntos. El tecnológico Nasdaq se lleva un castigo más abultado del 1,3% que devuelve su gráfica a los 14.600 puntos.
Para terminar de decantar la balanza por el lado de las ventas, la referencia clave de la sesión en el ámbito macroeconómico también daba muestras de debilidad. El índice de pedidos de bienes duraderos solo repuntaba un 0,8% frente al 2,1% que esperaba el consenso de los economistas.
Todo ello en un contexto en el que son muchos los que ya dirigen su mirada hacia la sede central de la Reserva Federal de EEUU (Fed). Este martes ha comenzado su reunión de política monetaria, cuyas conclusiones se conocerán el miércoles con los mercados ya abiertos a negociación.
Temporada de resultados
Por lo que se refiere al ámbito corporativo, la temporada de cuentas sigue su curso. La automovilística Tesla es una de las protagonistas después de haber publicado un beneficio neto atribuido de 1.142 millones de dólares frente a los solo 104 millones de hace un año. Además, las ventas engordaron un 98,1%. Sus acciones ceden un 2%.
El conglomerado industrial General Electric (GE) sube un 1% en bolsa tras haber dado a conocer pérdidas de 1.188 millones de dólares. Una cifra que supone unos números rojos un 45,5% más suaves que los cosechados hace un año gracias a una facturación un 8,8% más generosa, de 18.279 millones de dólares.
Beneficios al alza
Por su parte, el grupo de logística UPS ha anunciado ganancias por 2.676 millones de dólares en el segundo trimestre del año, lo que supone un 51% más que hasta junio de 2020. En el mismo periodo, las ventas situaron en 23.424 millones, con un crecimiento interanual del 14,5%. Sin embargo, los números se quedan muy por debajo de lo previsto por los analistas, de manera que sus títulos caen un 8%.
Este martes también llegaba el turno de cotizar cuentas para 3M, con caídas del 1%. La firma industrial, que durante la pandemia ha tenido un papel destacado en la fabricación de mascarillas, respiradores y otros productos sanitarios, ha referido un beneficio de 1.524 millones de dólares, que suponen un 16,7% más que hace un año.