Las bolsas europeas apuntaban en la apertura a otra sesión de atonía. Sin embargo, las compras se terminaban imponiendo en la mayoría de plazas a pesar de las dificultades sobrevenidas en la campaña de vacunación. El Ibex 35 subía un 0,74% tras girarse al alza a media sesión, hasta los 8.588,4 puntos. Un paso más cerca de la ansiada recuperación de los 8.600 puntos.
Uno de los motores de este giro y cierre alcista era Repsol, que se apuntaba subidas del 4,4% después de haber anunciado la venta de su red de gasolineras en Italia. Una operación de la que, sin embargo, no se aportaban detalles económicos pero bastaba para colocar a la energética al frente de la tabla de revalorizaciones.
Los valores turísticos se sobreponían al susto de la víspera por la suspensión del suministro de la vacuna de Janssen. Así, Meliá Hotels -un valor en el que los gestores de Horos han vuelto a aflojar cartera- sumaba un 3,6% a su gráfica, mientras que IAG repuntaba un 2,9%. El presidente de Iberia, la rama española del grupo de aerolíneas, apuntaba este miércoles a un plan para la recuperación progresiva de vuelos y destinos en el marco de su intervención foro 'Wake Up, Spain!' organizado por este portal.
Amadeus subía un más moderado pero significativo 2,3%. En empate con este repunte, ArcelorMittal, que apuntaba al alza desde primera hora. Su compañera de negocio, Acerinox, se limitaba a un 1,6% arriba.
Al verde se sumaban también los valores financieros que a primera hora se teñían de rojo. Tales eran los casos de BBVA (+1,5%) y CaixaBank (+1,1%). Y lo mismo Cellnex, que este miércoles se enfrentaba a la penúltima jornada de negociación para los derechos de su ampliación de capital.
Por el lado de los descensos, las energéticas poblaban este extremo de la tabla. El peor registro se lo llevaba Solaria, un 2,2% a la baja. Acciona (-1,6%), Endesa (-0,8%) e Iberdrola (-0,5%) se colocaban en este extremo. Entre ellas se colaban también Grifols y Cie Automotive, con descensos del 0,9% y el 0,8% respectivamente.
Mientras tanto, en el mercado secundario de deuda, el bono español a diez años repuntaba por encima de la cota del 0,4% que en las últimas sesiones había estado rondando. A pesar de todo, la prima de riesgo permanecía en los 68 puntos básicos, pues el resto de referencias soberanas también experimentaban subidas de tipos.
En este punto, tenía mucho que ver uno de los datos clave de la agenda macroeconómica del día. Y es que los inversores desayunaban con el dato de inflación de España, que en tasa armonizada anual clavaba el incremento del 1,2% que vaticinaban los economistas.