El éxito o el fracaso de la primera opa de BME Growth se decide en Málaga. Los hermanos Domínguez de la Maza y dueños de la firma textil Mayoral se han convertido en la pieza clave del rompecabezas que supone la oferta presentada por Atrys Health para hacerse con el control de Aspy Global y que está supeditada a una aceptación mínima del 90% del capital.
La negativa de Global Portfolio Investments SL, el brazo inversor de la saga dueña de Mayoral, podría dar al traste con una operación que se ha valorado en 223,8 millones de euros. Aunque el importe puede resultar calderilla frente a otras transacciones anunciadas en las últimas semanas, lo cierto es que la importancia de la misma radica en que es la primera vez que una cotizada del segmento de empresas en expansión de BME Growth se lanza a por otra del mismo mercado.
La sociedad inversora filial del holding Indumenta Pueri es dueña de un 5,21% de Aspy Global, según consta en la última actualización de posiciones relevantes de la compañía especialista en prevención de riesgos laborales. Su negativa a participar en la operación solo podría compensarse con una masiva aceptación de sus términos por parte de los inversores minoritarios. Y es que, sin los de Mayoral, el núcleo duro de inversores de la cotizada se queda en un 77,8% de su capital social.
Canje de acciones
A todo lo anterior se suma el hecho de que Atrys Health también ha exigido una aceptación mínima del 85% a cambio de acciones propias. Dicho de otro modo, si más de un 15% del capital de Aspy Global solicita los 2,875 euros contantes y sonantes por acción planteados en la opa, la transacción corre serio riesgo de convertirse en papel mojado.
El anuncio de la operación presentado a los supervisores de BME Growth, el antiguo Mercado Alternativo Bursátil (MAB), insiste en que “Atrys no prevé renunciar a la condición del nivel mínimo de aceptación”, aunque reconoce que si se quedase cerca, “se reserva la posibilidad” de hacer la vista gorda. Algo que, en cualquier caso, no parece sencillo si los de Mayoral rechazan la propuesta de canje establecida en una acción de la compradora por cada 3,147826 de Aspy.
El presidente vende
De momento Atrys Health ya cuenta con el sí del presidente y primer accionista de Aspy Global, José Elías Navarro. El empresario que también preside Audax Renovables ha adelantado que acudirá a la transacción con el 72,3% que aglutina a través de la sociedad Excelsior Times SLU. Además, ha especificado que aceptará el canje de su paquete por acciones de la compradora en lugar de exigir la contraprestación en efectivo señalada.
Esta manifestación es más que determinante y debería marcar el sentido de los hermanos Domínguez de la Maza para asegurar el éxito de la opa. No obstante, fuentes próximas a los empresarios malagueños no se han mostrado disponibles para atender a las preguntas de Invertia sobre cuál será su decisión en torno a la opa.
Mientras tanto, un portavoz de Atrys Health ha señalado a a este portal que “no sabremos hasta que haya transcurrido el plazo de aceptación”, aún pendiente de definir. En este sentido, ni siquiera se apunta a una comunicación institucional por parte de Indumenta Pueri antes de que la suerte esté echada y dado que el holding no cuenta con representación en el consejo de administración de Aspy, tampoco habrá pistas una vez que este órgano se pronuncie al respecto.
Sin embargo, lo cierto es que los dueños de Mayoral no son los únicos accionistas de la empresa de prevención de riesgos más allá del presidente José Elías. Por encima de los malagueños está la familia vasca Ybarra Careaga, que a través de Onchena SL es titular de un 5,5% de la cotizada de BME Growth. Sin embargo, el sentido de su voto no entraña tantas dudas. Aunque desde Atrys tampoco han querido pronunciarse, todo señala que el sí está más que asegurado.
El sí de Onchena
En este sentido, la sociedad Onchena SL es también dueña de un 6,42% del capital de la compradora. En virtud de este porcentaje, la saga de empresarios vascos cuenta con un asiento el consejo de administración de la firma que actualmente ocupa Antonio Baselga. En este hombre reside la clave para adelantar el respaldo a la operación, ya que la oferta cuenta -como es preceptivo- con el visto bueno del órgano rector del que forma parte.
Además, gracias a su presencia en ambas compañías, los Ybarra Careaga podrían incrementar su presencia en el grupo resultante de la fusión de ambas cotizadas. Una ventaja que otros accionistas relevantes de Atrys Health no tienen por no ser accionista de la opada.
Otras pistas sobre sus pasos a seguir están en que la operación también ha intervenido activamente el inversor Josep Maria Echarri, cabeza de la firma Inveready, inversor de Atrys y miembro de los consejos de administración de ambas sociedades. En la reciente opa sobre MásMóvil ambos inversores siguieron el mismo rumbo: vender toda su participación después de la firma de un compromiso irrevocable para adherirse a la oferta.
Informe independiente
Aunque no hay calendario cerrado para la primera opa de BME Growth -algo para lo que habrá que esperar al folleto de la operación-, sí que se ha fijado una fecha tope en el 30 de abril de este año. Para entonces, Atrys quiere que las condiciones suspensivas previas que ha establecido se hayan resuelto. Entre ellas, la celebración de la preceptiva junta de accionistas que apruebe la transacción y la necesaria ampliación de capital con la que atender el canje propuesto.
Desde la compañía que preside Santiago de Torres Sanahuja, se informa a este portal de que aún no hay fecha prevista para esta asamblea, ni de modo estimativo. Y es que, antes de eso, explican, habrá “un periodo de designación de un experto independiente para valorar la aportación al canje”.
Después tendrá que llegar su informe, que si apunta al precio como “equitativo” será uno de los documentos clave para que Atrys se salga con la suya. Primeramente, para definir el sentido favorable del voto de sus accionistas y, luego, para engordar el volumen de aceptación cosechado entre los inversores de Aspy. Incluidos los Domínguez de la Maza.