La euforia por el principio del fin del coronavirus ha vuelto a las bolsas. Aunque mucho más comedida que hace una semana por el enésimo obstáculo para la liberación de los fondos de reconstrucción en Europa. Las órdenes de compra se agolpaban en los mostradores de inversión tras conocerse que Moderna ha conseguido una efectividad del 94,5% para su vacuna frente a la Covid-19.
El freno de Hungría y Polonia a la puesta en marcha de los fondos Next Generation también frenaba el entusiasmo de los inversores. Sin embargo, la expectativa de una reapertura completa de la economía más cercana y con varias vacunas en el mercado para frenar la expansión del coronavirus resultaba en fuertes alzas en las plazas europeas.
En el caso del Ibex 35, los avances se multiplicaban gracias al sector financiero. La venta de BBVA de su negocio en EEUU deja a la entidad con una capacidad financiera suficiente como para reactivar el mercado de fusiones en el sector. Un escenario que se ha traducido para el índice español en alzas del 2,6% hasta los 7.986 puntos. La cota de los 8.000 enteros se escapaba a última hora.
El motor de estos avances llegaba con la venta del negocio de BBVA en EEUU a PNC Financial, que se traducía en especulaciones de nuevos movimientos de concentración en el mercado español. Unos rumores que, pocos minutos después del cierre bursátil se confirmaban.
BBVA acaba la sesión con alzas del 15,3% que lo colocaban en la segunda posición en la tabla de revalorizaciones del Ibex 35. El primer puesto era para el Sabadell, un 24,6% al alza al colocarse como blanco de la próxima operación según los analistas. Y no andaban desencaminados, pues al cierre ambas entidades han confirmado contactos para su eventual fusión que ya han resultado en un "proceso de revisión recíproco".
Las alzas eran del 6,1% en CaixaBank y alcanzaban un 6,1% en Bankia, las protagonistas de una fusión ya confirmada y muy avanzada. Bankinter, más rezagado la semana pasada, sumaba un 4,6% y el Santander limitaba su avance al 2,8%.
El anuncio de Moderna se traducía en fuertes alzas para Meliá Hotels (+10,1%) e IAG (+9,8%), que pertenecen al penalizado sector turístico. Un segmento de la economía que precisa de una vuelta clara a la vieja normalidad para impulsar su negocio.
En sentido opuesto, PharmaMar volvía a colocarse como farolillo rojo. Las pérdidas de solo el 0,2% de la apertura se traducían en un castigo del 9,99% al cierre, en los 91,9 euros por acción ante el creciente temor de que su Aplidín llegue demasiado tarde a la lucha por un remedio médico frente a la Covid-19.
El podio bajista lo completaban Cellnex (-3,9%) y Solaria (-2,8%), que publicaba sus cuentas trimestrales. La renovable daba este lunes cuenta de un beneficio neto de 25,13 millones de euros hasta septiembre, un 79% superior a la cifra conseguida en el mismo periodo de un año antes.
Mientras tanto, en el mercado secundario de deuda soberana, la prima de riesgo repuntaba ligeramente hasta los 65 puntos básicos. Los bonos españoles marcaban tipos del 0,10% frente al -0,55% del 'bund' alemán en una jornada en la que se ha conocido que el Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a disparar sus compras. Hasta máximos de los últimos cuatro meses.