El peso de los fundadores de Solaria nunca antes había sido tan bajo en el capital de la compañía. DTL Corporación, la sociedad a través de la cual Enrique Díaz-Tejeiro y su familia ostentan la participación más relevante en el accionariado de la renovable, ha comunicado al supervisor que ya es dueño de menos de un 40% de sus títulos.
La caída por debajo de esta significativa cota es fruto de la segunda reducción que se comunica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en lo que va de año. Esta última tiene fecha, según consta en el formulario remitido por la sociedad de los Díaz-Tejeiro, del pasado 28 de agosto. Del 44,94% se ha pasado al 39,96% de la última comunicación.
Este paquete sigue siendo, sin embargo, el más significativo entre los accionistas relevantes de Solaria, un elenco del que ahora solo forma parte BlackRock (3,2%) además de DTL Corporación. La cartera actual de la sociedad capitaneada por el presidente y fundador de la compañía alcanza una valoración de 839,83 millones de euros, en función de los máximos de 12 años en los que actualmente se mueve la cotización de la renovable.
Todo en acciones
La reducción de cartera se atribuye en el comunicado remitido a la CNMV a la “modificación en el número de derechos de voto del emisor”. Sin embargo, la compañía no ha comunicado ningún cambio en este aspecto al supervisor en lo que va de año y la última alteración en esta línea recogida en el apartado de accionistas e inversores de la web corporativa del grupo se fecha en 2019.
En cualquier caso, la posición se constituye íntegramente a través de acciones de la compañía. Nada con derechos de voto atribuibles a derivados. En concreto, se trata de 49,93 millones de acciones de Solaria.
En la comunicación previa de DTL Corporación, fechada en mayo de este año, se anunciaba una cartera de 56,15 millones de títulos. Un paquete que ya rebajaba los 62,24 millones -equivalentes a un 57,63% del capital- de los que daba cuenta en julio de 2018.
Las compras del 'número dos'
Este movimiento llega poco después de que el vicepresidente ejecutivo de Solaria, Arturo Díaz-Tejeiro, anunció la compra de 40.000 acciones de Solaria por 514.000 euros. Entonces, la compañía explicó que el también miembro de la saga fundadora “incrementa su compromiso con la compañía”.
En este sentido, y en línea con las medidas de prevención frente al posible impacto de la epidemia en las finanzas de la compañía, Arturo Díaz-Tejeiro renunció a su salario como miembro del consejo de administración por 75.000 euros anuales. Con anterior a la irrupción del coronavirus ya estaba establecido que no percibiese retribución por su puesto ejecutivo en la cúpula de la compañía.
La acción dobla el precio
Al calor de estos movimientos, Solaria se apuntó recientemente un nuevo tramo alcista a una remontada que ya acumula un 147% desde que empezó el año.
El apetito que ha generado la energía renovable entre los inversores como una de las grandes palancas de recuperación económica, fundamentalmente a raíz de la aprobación del plan europeo Next Generation se ha consolidado como el principal catalizador alcista para su pujante gráfica.
Así irrumpió DWS Investments, la gestora del grupo Deutsche Bank, con máximos históricos de inversión en Solaria. La entidad comunicó el pasado 10 de julio una posición equivalente al 3,27% del capital social de la renovable, en la que había desembarcado hace algo menos de cuatro meses.
No obstante, el pasado 28 de julio redujo esta posición hasta un 2,733% del capital, con lo que ya no figura entre los accionistas relevantes de la energética española.