Bankinter aguanta sus tesis de inversión para la entrada en el tercer trimestre del año. Los analistas de la entidad consideran que las bolsas siguen teniendo potencial alcista, ven “improbable” que se estén viendo sobrevaloraciones en los índices y aconsejan ir rotando carteras desde las gigantes del Nasdaq hacia “tecnológicas de segunda fila” en la bolsa americana.
El director de análisis de la entidad, Ramón Forcada, ha insistido este martes en una presentación telemática en que la irrupción del coronavirus “ha supuesto un shock de impacto, pero no un cambio de ciclo económico”. Por esta razón, reitera el grueso de sus tesis de inversión, fundamentadas en las previsiones de beneficios corporativos que dibujan para el año 2021, con una subida del 6% frente a 2019.
En este sentido, Forcada ha explicado que “las bolsas van a ir más lentas, pero van a seguir recuperando”. El experto ha subrayado que esto “ni siquiera es malo”, sino la consecuencia de lo que a su juicio es “un pesimismo excesivo generalizado” que se ha extendido a instituciones económicas de todos los estamentos y regiones. Tanto es así que defiende que “la contracción de la economía que hemos visto ha sido muy inferior a la que preveíamos”.
Mejor Wall Street que Ibex
“Sin ir más lejos, en España el PIB del primer trimestre del año se ha contraído un 4,1% cuando nuestro escenario más optimista era del 4,8%”, señala el informe de perspectivas presentado este martes. Los números que se barajan en la entidad que dirige María Dolores Dancausa pasan por una caída de la economía del 7,1% este año para remontar un 2,3% el que viene.
Con este telón de fondo, los analistas de Bankinter consideran que el Ibex 35 tiene potencial para recuperar los 7.457 puntos este año, lo que supondría cerrar en negativo, pero una remontada del 4% desde su actual precio de mercado. Un margen estrecho pero “suficientemente atractivo en un entorno de tipos de interés al 0%”, ha subrayado Forcada.
Sin embargo, la cancha es mayor en el EuroStoxx 50, al que ven subiendo un 8% hasta los 3.462 puntos y aún más abultada para el S&P 500 de Wall Street, al que conceden los 3.449 puntos que implican una subida del 15%. Ante estos números, no es de extrañar que en la entidad hayan señalado: “Si tenemos que quedarnos con una cartera, elegimos la americana”.
No obstante, consideran que el tiempo de las gigantes tecnológicas podría haber llegado ya a su fin. Al menos, a su tiempo como motores de las subidas de la bolsa estadounidense.
Más allá de las FAANG
En este sentido, desde el equipo de análisis consideran que “en la segunda mitad del año vamos a ver más tirón en compañías tecnológicas de segunda fila, por lo que vemos menos interesante la posibilidad de indexarse al Nasdaq”. En este grupo incluyen a nombres como Nvidia y los desarrolladores de videojuegos Activision y Electronic Arts.
Por sectores, los favoritos de la entidad en un contexto en el que “la inflación ha desaparecido y los estados y las empresas tienden a endeudarse” son lujo, infraestructuras y consumo duradero, además de las ya mencionadas tecnológicas. También miran con buenos ojos a “sectores favorecidos por las tendencias de demanda” como el farmacéutico, el sanitario y las energías renovables, lo que supone un acicate para la inversión en muchas utilities.
Sobre este último punto, Arancha Bueno ha señalado a las eléctricas como el gran baluarte de la inversión por dividendos. La analista ha destacado que “están manteniendo sus guías de dividendos, que en algunos casos hasta incluían subidas”.
De ellas destaca que pueden permitírselo porque “van a ganar los mismo con la parte regulada, mientras que en comercialización están ampliando márgenes”. Entre las favoritas para recibir dividendos en un tiempo en el que escasean, ha señalado hacia Iberdrola, Endesa y EON.
Refugios al dividendo
En sentido opuesto, Juan Moreno ha advertido de que espera recorte de dividendos en el conjunto de las socimis. En este sentido, ha señalado que la llegada del teletrabajo afectará especialmente a aquellas firmas del sector más enfocadas en activos de oficinas. En este sentido, ha señalado que el escenario que maneja la entidad para Merlin Properties “es que va a dejar de pagar el 33% del dividendo que de momento ha pospuesto”.
Por su parte, el analista de banca, Rafael Alonso, ha valorado positivamente que “la percepción de las subastas de liquidez del Banco Central Europeo (BCE) ha cambiado” y las entidades que acuden a ellas ya no son señaladas. Aunque ha descartado pagos al accionista en lo que resta de año, sí que ve muy probable que “un exceso de capital pueda repartirse a modo de dividendo extraordinario en 2021”.
Esto podría ocurrir en Bankia, que ya tenía prevista una distribución de este tipo para este ejercicio.
Deuda corporativa
En opinión de la analista Aránzazu Cortina, “el fondo de mercado ha mejorado por los estímulos fiscales y la facilidad de los bancos centrales para ampliar la potencia o alcance de sus programas”. Los grandes riesgos en el horizonte son para ella una vuelta atrás en la desescalada por una segunda oleada del coronavirus y que resurjan las tensiones comerciales entre EEUU y China o la Unión Europea.
Por lo que se refiere a divisas, el banco español espera que el dólar recupere terreno hacia el entorno de los 1,10-1,15 ‘billetes verdes’ por euro. No obstante, sus proyecciones barajan un cierre de año más cercano a los 1,20 dólares. En renta fija, la preferencia de la entidad está en bonos corporativos y la parte media de la curva de los soberanos estadounidenses, sin entrar en grado 'high yield' por los crecientes riesgos de impago que supone la todavía incierta situación económica.