Las grandes firmas de inversión reajustan sus carteras una vez que los mercados parecen haber superado ya los compases más extremos de volatilidad. BlackRock ya tiene prepara su cesta para ganar con la recuperación económica y los activos de riesgo son favoritos frente a los más conservadores en los que muchos han buscado refugio en las últimas semanas.
BlackRock avisa de que no se trata de buscar un ‘pelotazo’ a corto plazo, sino de “una necesidad y una oportunidad para que los inversores a largo plazo ajusten sus asignaciones estratégicas”. Una convicción que consideran sobradamente justificada “únicamente por las ineficiencias en los precios y los posibles cambios en los fundamentales a medio plazo”.
El giro que la mayor gestora mundial de activos -cuenta con una cartera de más de 7,4 billones de dólares- se resume en la siguiente sentencia: “Disminuir las asignaciones a la deuda pública nominal e incrementar la exposición a los activos de riesgo”. No obstante, en ambas recomendaciones hay matices y más y menos preferidas.
Más China que Japón
A pesar de que, como explica la plana mayor del equipo de estrategas de BlackRock , “la renta variable mundial cerró el mes de abril registrando su mayor ganancia mensual desde 2011”, las perspectivas hacia una “reapertura prudente de las economías” sostiene estos avances. Y, puestos a escoger, los estadounidenses se quedan en casa y optan por Wall Street frente a las bolsas europeas.
La firma de inversión sobrepondera la renta variable estadounidense por su “sesgo de calidad relativa” y por la “considerable respuesta política” al coronavirus que ha combinado “un gran estímulo fiscal” con el compromiso de la Reserva Federal (Fed) de mantener los tipos bajos y la fluidez del mercado crediticio.
En su lugar, infrapondera Europa porque percibe “mayor potencial en cualquier otro lugar ante una eventual recuperación”, además de subrayar su “mayor dependencia del comercio internacional”.
Por lo que se refiere al resto de plazas bursátiles, BlackRock se muestra neutral hacia los mercados emergentes, negativo con Japón y positivo con el resto de Asia debido, fundamentalmente, a los claros síntomas de recuperación de la epidemia que ya está dando la economía china.
No es momento para el 'value'
En cuanto a estilos de inversión, la americana prefiere confiar en estrategias focalizadas en compañías de calidad así como de minimización de la volatilidad. Lo que sus estrategas tienen claro es que este tampoco será el año del ‘value’, puesto que “se ha desempeñado mejor en periodos de aceleración del crecimiento, y ahora vemos que el brote de coronavirus presenta riesgos negativos para la economía”.
En ‘momentum’ se muestran neutrales dado el mejor rendimiento que sus estrategias han logrado aportar ya en los episodios recientes más bajistas del mercado.
Por lo que se refiere a renta fija, en BlackRock aconsejan alejarse de los ‘bunds’ alemanes porque “proporcionan poca protección contra los principales eventos de riesgo”. Una circunstancia que también amplían a los bonos soberanos de EEUU, los conocidos como ‘treasuries’, pero los prefieren porque en ellos perciben “más potencial para una reducción de rentabilidades [con su consecuente subida de precios] que en cualquier otro mercado desarrollado”.
En este punto, los bonos periféricos de la Eurozona se convierten en apuesta preferente de la gestora estadounidense. Además de considerar que los nuevos programas de estímulo y compras desplegados por el Banco Central Europeo (BCE) suponen “un gran apoyo” para estos papeles, el reciente abaratamiento de los mismos supone una oportunidad de entrada más atractiva.