La Sección Segunda de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Madrid (TSJM) ha desestimado la adopción de la medida cautelar de paralizar la entrada en funcionamiento de las restricciones de tráfico en el área de Madrid Central, prevista para mañana.
Esta resolución rechaza la pretensión de Automovilistas Europeos Asociados, pero no anticipa en modo alguno ni prejuzga ni es antecedente de otras resoluciones que pudieran dictarse en otros procedimientos y en los que se utilizan argumentos distintos a los esgrimidos en la solicitud, han indicado fuentes del TSJM.
La AEA justificaba su petición de suspensión en el hecho de que "mientras en la ordenanza la obligación de exhibir el distintivo ambiental que identifica la clasificación ambiental de los vehículos según su potencial contaminante no entra en vigor hasta el 23 de abril de 2019, el acuerdo de la Junta de Gobierno anticipa su exhibición al próximo día 30 de noviembre".
La coordinadora general de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Movilidad, Paz Valiente, ha contestado a preguntas de los periodistas tras la Junta de Gobierno que el distintivo de las etiquetas "es una cuestión informativa y por eso la ordenanza no exige la obligación de exhibirlas hasta abril".
Madrid Central se basa no en el sistema de etiquetado sino "en las cámaras que leen las matrículas, datos que se cruzan con los de la Dirección General de Tráfico (DGT)". Es por eso que desde Cibeles no ven consistente el argumento de AEA. Todas las cámaras están ya instaladas, ha indicado.
En este punto, Sabanés ha recordado que con el protocolo que establece el acceso por matrículas pares e impares "la Comunidad y distintas organizaciones decían que había que referirse a las etiquetas ambientales, que para eso las hacía la DGT". Sabanés había señalado que esperaba que la Justicia "escuche al Ayuntamiento" y tenga en cuenta las normativas y directivas europeas, así como los compromisos de España en la lucha contra la contaminación, independientemente de que "todo el mundo pueda recurrir". "Nos jugamos la salud de los ciudadanos y multas descomunales", ha advertido.
PRIMERA FASE, SIN MULTAS
La primera fase será informativa con controles manuales de Policía Municipal y Agentes de Movilidad, esto es, lo que rige fundamentalmente desde este viernes es la señalización vertical y horizontal, con las líneas de color rojo. Los policías informarán de las normas de Madrid Central.
En enero entrará en funcionamiento el control automático con dos meses de notificaciones de las infracciones sin multas. Se trata de una primera fase de evaluación que será reforzada con una campaña de comunicación continua. Además desde este viernes saldrá a la calle tanto un autobús informativo como informadores. Esta zona de bajas emisiones, incluida en el Plan A de Calidad del Aire, tiene como objetivo "reducir la contaminación, el ruido y mejorar el reparto del espacio público", en palabras de Sabanés: en 472 hectáreas, prácticamente la totalidad de Centro, estará restringido el tráfico de los vehículos, excepto residentes, transporte público, los vehículos de determinados colectivos necesarios para la vida del distrito y los menos contaminantes, según los distintivos ambientales de la DGT. PERÍMETRO DE MADRID CENTRAL
Madrid Central conseguirá eliminar el tráfico de paso por el distrito y también los vehículos más contaminantes y que más kilómetros realizan para conseguir una reducción de emisiones del 40 por ciento en la zona. Madrid Central está delimitada por la circunvalación de rondas, bulevares y el eje Prado-Recoletos. El perímetro lo forman las calles Alberto Aguilera, glorieta de Ruiz Jiménez, Carranza, Sagasta, glorieta de Bilbao, Génova, plaza de Colón, Paseo de Recoletos, plaza de Cibeles, Paseo del Prado, plaza de Cánovas del Castillo, glorieta de Carlos V, Ronda de Atocha, Ronda de Valencia, glorieta de Embajadores, Ronda de Toledo, glorieta de la Puerta de Toledo, Ronda de Segovia, Cuesta de la Vega, Mayor, Bailén, plaza de España, Princesa y Serrano Jover. Por la zona delimitada pasan más de 70 líneas de la EMT, seis de Metro y nueve de Cercanías. Hay además 59 paradas de Bicimad, 27 paradas de taxi y una decena de empresas de carsharing, junto a 9.000 plazas de rotación y 4.000 plazas en aparcamientos disuasorios en la ciudad. Sabanés ha insistido en que se llega a Madrid Central tras tres años de trabajo y un proceso "dialogado" con todos los sectores, expertos, con el Ministerio, etc. Los paneles informativos con la ocupación de los parkings llegarán en "dos o tres meses", ha indicado Paz Valiente, que ha recordado que las actuales APR no disponen de esta medida. Se está trabajando ya con los parking privados que se han querido adherir para poder disponer de esos datos con un decalaje de tres minutos. El objetivo es colgar esa información como datos abiertos y poder desarrollar APP con los datos en tiempo real.