El protocolo que firmarán hoy los presidentes chino, Xi Jinping, y español, Pedro Sánchez, sobre el sector del porcino ampliará las posibilidades del porcino en el mercado asiático al permitir que los chinos puedan comprar en supermercados -o ver en los locales de comida- la pieza de jamón, con su pata y su pezuña: una imagen tan arraigada en la restauración y hostelería española.
China da el visto bueno a envíos de jamones y paletas con hueso -hasta ahora sólo se permitían los deshuesados o loncheados- y eso facilita la labor de las empresas españolas interesadas.
Una de las primeras firmas que aterrizaron en el gigante asiático fue Sánchez Romero Carvajal, con su marca 5J, que llegó a China como el jamón oficial de la Exposición Universal de Shanghái en 2010, lo que fue punto de partida para contactar con futuros clientes, explican a Efe fuentes de la empresa.
La locura por este producto es tal que esta compañía de Jabugo (Huelva) tuvo que abrir una oficina permanente en Shanghái y envía cada año a uno de sus cortadores de jamón para impartir cursos, donde es recibido "como una estrella y firmando autógrafos".
China es su primer destino internacional -si se incluye Hong Kong- y los volúmenes de envío crecen a dos dígitos cada año con los restaurantes y tiendas en la zona este del país como principales destinos, si bien también lo pueden adquirir en plataformas comerciales digitales.
En el caso de la empresa salmantina Ibéricos Torreón, superó en 2008 los arduos protocolos e inspecciones sanitarias chinas.
Su directora de Exportación, Laura García, asegura a Efe que sus ventas crecen año tras años desde hace una década, principalmente a Shangai, Pekín, Guangzhou, Wenzhou y Tianjin.
En su caso, envían jamón con las diferentes categorías del ibérico, deshuesado para los restaurantes y en lonchas para las tiendas.
Embutidos Fermín se asentó en China en 2009 y detallan que en su caso envían el producto a un operador que distribuye el ibérico entre supermercados y locales de restauración de Pekín, Shanghái y Guangzhou.
De momento, de sus dos plantas de producción, sólo una cuenta con la autorización para exportar, ya que es "bastante complicado" el proceso según remarcan a Efe, con visita incluida de autoridades sanitarias chinas a la empresa.
El nuevo protocolo que se firmará hoy "simplificará mucho" la exportación con este país, aseguran las mismas fuentes.
Tres experiencias de las más de veinte empresas que ya comercializan productos porcinos a China, una cifra que previsiblemente se incrementará en los próximos años siempre y cuando los empresarios consigan cumplir con los escrupulosos requisitos de las autoridades chinas. EFECOM
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