Prisa parece ver la luz en medio de la pesadilla financiera en la que se ha transformado su filial portuguesa Media Capital. Este viernes el editor de El País ha anunciado la venta del 64,47% de la compañía por 36,8 millones de euros -sin incluir deuda- lo que la valora en 150 millones de euros.
Esta operación se suma a la que ya había cerrado antes del verano por la venta del 30,22% de Media Capital a Pluris Investments, sociedad del empresario portugués Mario Ferreira. Un movimiento que se llevó a cabo mediante una transmisión en bloque de las acciones por un precio de 10,5 millones.
Fuentes financieras consultadas por Invertia indican que la venta del nuevo paquete de acciones -con lo que Prisa abandona completamente la compañía- se ha hecho entre pequeños inversores que no tendrían por separado más del 20%. De esta manera, Pluris pasaría a ser el accionista mayoritario.
Prisa advierte que la actual operación representa una prima del 63% respecto del precio por acción ofrecido por Cofina en su abortada oferta pública voluntaria sobre las acciones de Media Capital, publicada el pasado 12 de agosto.
Según las estimaciones de Prisa, esta transacción supondrá una pérdida contable en las cuentas individuales y consolidadas del grupo de aproximadamente 48,5 millones de euros.
La operación, que ha sido autorizada por Pluris en el marco del pacto de accionistas suscrito, está condicionada a la obtención de un waiver de determinados acreedores financieros de Prisa, así como a la autorización de las autoridades regulatorias portuguesas.
Dos ventas fallidas
El pasado 11 de marzo el grupo Cofina renunció a realizar su última ampliación de capital, condición necesaria para cerrar la operación de compra de Media Capital a Prisa por 170 millones de euros. En ese momento, el editor de El País anunció todas las acciones legales a su disposición para asegurar que se cumpliera el contrato firmado entre las partes para la venta de la compañía audiovisual.
Cofina aprobó el pasado 29 de enero de 2020 una ampliación de capital con la que financiaría la compra de Media Capital y ponía en marcha el último requisito para cerrar la operación. No obstante, días después renunció a realizar esta ampliación "por las condiciones de mercado" con lo que dió a entender que daba marcha atrás en la compra.
La adquisición solo estaba pendiente de la inscripción en el Registro Mercantil de Portugal (Conservatória de Registo Comercial) y del aumento de capital aprobado por Cofina para financiar parte del precio de la compraventa. De hecho, Prisa ya había apuntado la operación en sus cuentas y había sacado de su perímetro financiero la compañía audiovisual portuguesa.
Esta situación convirtió la venta de Media Capital en un verdadero drama para Prisa que lleva desde 2017 en venta tras dos operaciones fallidas. En junio de 2018 se truncó la primera de estas operaciones después de once meses de deliberaciones. El regulador portugués bloqueó la operación considerando que se hubiese producido una concentración del mercado audiovisual entre Media Capital y Altice.
Tras este varapalo y la pérdida de los 440 millones comprometidos, la compañía estuvo en el mercado desde comienzos de 2019 con el objetivo principal de amortizar la deuda. En septiembre de 2019 se cerró un nuevo acuerdo, esta vez con Cofina, aunque por 170,6 millones, casi la mitad de lo que se había valorado un año antes. Ahora se vende toda la compañia por 46 millones, aunque sin deuda.