Cuando todo parecía que se había estabilizado en la redacción de El Mundo, las aguas han vuelto a enturbiarse. La dirección del grupo ha comunicado a los representantes de los trabajadores que se avecinan cambios en las delegaciones del diario, y que dentro de esa reestructuración se enmarcan nueve despidos. 

A la cabeza de las salidas está el director de El Mundo en Cataluña, Álex Sàlmon, que abandona el diario después de 30 años en la casa. Junto a él, en su delegación, se van otras dos personas. Los despidos afectan a otras delegaciones: en Valencia serán despedidas dos personas (una en Valencia y otra en Alicante), en Baleares tres y en el País Vasco una. Así lo confirman fuentes sindicales a EL ESPAÑOL. 

Está por ver si algún otro director de delegación se ve afectado, ya que la intención es que esa figura deje de existir y pasen a convertirse en redactores jefe. 

Causas económicas

Se trata de unos despidos inesperados y que se anunciaron el pasado martes en una llamada urgente a los representantes de los trabajadores por parte del grupo Unidad Editorial. ¿Los motivos para estos despidos? "Causas objetivas de carácter económico", argumenta la compañía, por lo que todas las personas que abandonan el diario se van a su casa con 20 días por año trabajado y un máximo de 12 mensualidades. Es decir, lo que marca la ley. 

Miembros de los sindicatos de El Mundo explican a este diario que el objetivo es que, poco a poco, las delegaciones vayan prestando más apoyo a la redacción central de Madrid. Es decir, que dan por hecho que llegado el momento las delegaciones pasarán a ser meras corresponsalías que enviarán sus crónicas a la web y al papel que se edite en Madrid.  

Al parecer, la dirección habría trasladado que "no se puede competir con la prensa regional", aunque los trabajadores son bastante más claros: "No hay publicidad". 

Sorpresa

Los nueve despidos han pillado por sorpresa a los sindicatos que no esperaban una noticia de este tipo, y mucho menos sin que haya habido negociación alguna de por medio. En los cuatro ERE anteriores de Unidad Editorial siempre se ha negociado.

Los sindicatos recuerdan, por ejemplo, el primer gran despido colectivo que se produjo en 2016, cuando se logró que los trabajadores que abandonaban El Mundo se fueran con 37 días por año trabajado, un máximo de 20 mensualidades y 5.000 euros lineales. "Son condiciones muy alejadas de las que se han dado en esta ocasión", lamentan.