La disputa entre las aerolíneas y Aena por la subida de las tasas aeroportuarias escala un nuevo peldaño. El CEO de Ryanair, Eddie Wilson, ha reclamado, cara a cara con el presidente de Aena, Maurici Lucena, revertir el incremento de las tarifas.

"Queremos crecer en España, pero para lograrlo necesitamos tener tarifas aeroportuarias competitivas para ese tráfico adicional", ha afirmado Wilson durante una mesa redonda en el Foro Hotusa en la que también participaba Lucena.

El presidente del gestor aeroportuario, por su parte, ha alegado que la subida de tasas tiene dos fines. Por un lado, invertir más para que los aeropuertos españoles tengan más capacidad. Y, además, para garantizar que los accionistas de la compañía público-privada reciben una "retribución razonable".

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Sin embargo, el máximo ejecutivo de Ryanair ha asegurado que las economías del sur de Europa no deberían aplicar subidas de tasas porque eso hará que volar sea "más caro y menos accesible". Con todo, ha asegurado que la compañía actuará "de forma responsable".

Sin embargo, según Lucena, en los últimos años las tarifas aeroportuarias se han reducido. De acuerdo con el presidente de Aena, de 2015 a 2023 han bajado nominalmente casi un 11%, una caída que llega "en términos reales" -teniendo en cuenta la inflación- al 32%.

El presidente de Aena, Maurici Lucena Carlos Luján Europa Press Madrid

Así, ha zanjado, "si se produce la subida anunciada por el ministro de Transportes (Óscar Puente), las tarifas serán más bajas que en 2019, mientras que, desde entonces, la inflación ha avanzado más de un 15%".

El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, que ha inaugurado el Foro Hotusa, ha señalado a los medios tras su intervención que la subida de tasas tendrá un "efecto marginal" sobre la competitividad del sector turístico español. "El atractivo de España está por encima de la subida de tasas", ha zanjado.

La semana pasada, Puente confirmó que las tarifas aeroportuarias subirán un 4,09% a partir de marzo, una decisión que ha sido criticada desde las aerolíneas porque, aducen, se traducirá en unos billetes más caros. Además, aseguran que puede reducir las inversiones de estas compañías en España, debilitando la capacidad y conectividad del país.