En 2020, Pullmantur se declaró en concurso de acreedores al no aguantar los efectos de la Covid en su negocio. A partir de aquí arrancó una carrera sin tregua por reflotar la naviera, pero sin éxito. En paralelo, se selló un expediente de regulación de empleo (ERE) que no convenció a una parte de sus trabajadores y lo impugnaron. Dos años después, siguen esperando una fecha de juicio. 

“Seguimos a la espera de una fecha”, reconocen a este medio desde Camacho & Villa Abogados, el despacho que defiende a los trabajadores. Y ya van dos años desde entonces. Entre los motivos que están alargando esta agónica espera está la huelga indefinida de secretarios judiciales que se convocó a partir del 24 de enero y se alargó hasta casi finales de marzo. 

Recordemos que Pullmantur sí llegó a un acuerdo con una parte de sus trabajadores a los que les abonó 6,5 millones de euros en concepto de indemnizaciones. La mayoría de los que aceptaron eran empleados con poca antigüedad a los que les beneficiaban más las condiciones.

[El Tribunal Superior de Madrid, última baza para los trabajadores de Pullmantur tras impugnar el ERE]

Sin embargo, un grupo formado por entre 30 y 40 trabajadores -con mayor antigüedad en la empresa- no quedaron convencidos e impugnaron el ERE que la naviera aprobó en abril de 2021 para toda la plantilla (320 trabajadores). 

Estos consideran que hubo fraude de ley. El equipo de abogados alega que en la negociación del ERE se produjeron ciertas irregularidades. Una de ellas es que la comisión negociadora llamó a la mesa de negociación a Royal Caribbean, principal accionista de Pullmantur.

Esta debía aportar documentación económica al expediente sobre esa sociedad, pero se produjo “una omisión de los documentos”, según la defensa de los trabajadores. 

De hecho, el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid obligó en enero de 2022, por un lado, a repetir las negociaciones del ERE de Pullmantur y, por otro, a que Royal Caribbean y otras empresas del grupo estuvieran presentes en estas reuniones.

En este auto al que tuvo acceso EL ESPAÑOL-Invertia, el juez determinó que Royal -que es solvente- quería desprenderse de Pullmantur y quedarse con el hueco que deja en el mercado español. 

La estrategia de la defensa de los trabajadores no descarta acabar en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) como última baza frente a la naviera en caso de no ganar el juicio para el que aún no hay fecha, por lo que la resolución de este frente judicial podría alargarse en el tiempo. 

Venta de la marca

Pero este no es el único frente abierto para lo que queda de la naviera. En noviembre de 2022 la jueza del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid aprobó el plan de liquidación de Pullmantur. En ese momento, el administrador concursal (Data Concursal) comenzó las tareas orientadas a vender los activos de la compañía, entre ellos su marca comercial. 

Dicho proceso se amplió un mes más, hasta el 8 de marzo, por la falta de concurrencia de ofertas, según puso saber EL ESPAÑOL-Invertia. Sin embargo, hasta la fecha se desconoce si ha habido más ampliaciones o si se está estudiando algún tipo de oferta. Este medio no ha obtenido respuestas del administrador concursal sobre estas cuestiones.