La UE aprueba imponer nuevas obligaciones de información a plataformas como Airbnb
El objetivo del reglamento es ayudar a una mejor ordenación del sector y a impulsar un "ecosistema turístico equilibrado en la UE".
2 marzo, 2023 14:31La Unión Europea se adentra por primera vez en el espinoso territorio de regular los alquileres turísticos de corta duración, aunque lo hace con extrema cautela, con una norma de mínimos. Los ministros responsables de Competitividad de los 27 han aprobado este jueves un reglamento que obliga a las plataformas como Airbnb a suministrar a las autoridades nacionales (una vez al mes y de forma automatizada) datos sobre el número de noches alquiladas y de huéspedes.
El objetivo de esta iniciativa es ayudar a una mejor ordenación del sector y a impulsar un "ecosistema turístico equilibrado en la UE". Y es que el alquiler de apartamentos, casas o habitaciones por periodos cortos de tiempo se ha convertido en una forma común de alojamiento para turistas y viajeros. Las plataformas online han potenciado el uso de estos servicios, que actualmente suponen casi una cuarta parte del total de alojamientos turísticos de la UE, según los datos de Bruselas.
La rápida expansión del sector ha generado inquietud y problemas para las comunidades locales, agravando por ejemplo la escasez de viviendas asequibles. Las nuevas normas mejorarán la recogida y el intercambio de datos de los anfitriones y las plataformas en línea. Esto, a su vez, servirá de base para unas políticas locales eficaces y proporcionadas que permitan "abordar los desafíos y las oportunidades del sector del alquiler de alojamientos de corta duración", sostiene la Comisión Europea.
Airbnb ha asegurado que "estas normas suponen un paso adelante hacia unas normas más transparentes, coherentes y armonizadas para los anfitriones de todos los días en todo el bloque". No obstante, pide a la UE que actúe contra aquellas ciudades que a su juicio imponen excesivas restricciones al alquiler turístico de corta duración, entre las que cita a Bruselas y Barcelona.
El nuevo sistema funcionará con un nuevo sistema de registro armonizado en toda la UE. Cualquier casa, apartamento o habitación que se ofrezca en alquiler turístico por un número limitado de días al año tendrá que registrarse en su Estado miembro, proporcionando una serie de datos armonizados sobre el anfitrión y la propiedad (tipo de unidad, número máximo de plazas, nombre, dirección, teléfono, etc.). Al completar el registro, los anfitriones deberán recibir un número de registro único.
El reglamento exige a las plataformas como Airbnb que faciliten que los anfitriones muestren este número de registro en ellas. También tendrán que verificar de forma aleatoria si los anfitriones se han registrado y si se muestran los números correctos. Las autoridades públicas tendrán la posibilidad de suspender números de registro y pedir a las plataformas que eliminen a los anfitriones que no cumplan las normas.
Los Estados miembros deberán crear una "ventanilla única digital" para la recepción de los datos de las plataformas sobre el número de noches alquiladas y de huéspedes. Las autoridades públicas, ya sean de nivel local, regional o nacional, podrán solicitar solamente la información que sea pertinente para ellas. En la práctica, esto significa que, por ejemplo, las autoridades de una ciudad solo podrán solicitar datos sobre su ciudad y no tendrán acceso a los datos de anfitriones de otra ciudad ni de las regiones vecinas.
Bruselas sostiene que este sistema reducirá los trámites burocráticos y los costes para los anfitriones y las plataformas, al tiempo que brindará a las autoridades los datos que necesitan para regular la actividad. Esto también creará igualdad de condiciones con otros actores del sector turístico (como hoteles, hostales o apartahoteles) y ayudará a combatir el fraude.
Esto reducirá los trámites burocráticos y los costos para los anfitriones y las plataformas, al tiempo que brindará a las autoridades los datos que necesitan para regular la actividad. Esto también creará igualdad de condiciones con otros actores del sector turístico (como hoteles, hostales o apartahoteles) y ayudará a combatir el fraude. El reglamento todavía debe ser negociado y aprobado por el Parlamento Europeo.