Cataluña autoriza que los propietarios alquilen parte de su vivienda a turistas

El alquiler de las viviendas y el turismo son dos grandes cuestiones que preocupan en los grandes núcleos urbanos. Cataluña ha aprobado un decreto con el que cualquier propietario puede destinar su vivienda para el alquiler turístico. Una medida muy celebrada por plataformas como Airbnb, pues permite reforzar su negocio de gestión de alquileres para turistas. 

La aplicación que gestiona alquileres para turistas afirma que los viajeros registrados en su plataforma, que tienen como destino la ciudad condal, gastan la mitad de su presupuesto para el viaje en las comunidades locales, según los datos que manejan. 

Por ello, que el Govern permita el hogar compartido puede ser una vía de beneficios para los arrendatores: "Estos alquileres son esencialmente buenos para las ciudades y los municipios de Cataluña y para las personas que residen en ellos, al ser una fuente de ingresos económicos vital para muchas de sus  familias", explica la empresa en un comunicado. 

Un paso adelante

También conocido como home sharing, esta forma de alquiler permite a un particular compartir una parte o la totalidad de su vivienda de manera temporal o durante su ausencia. Se trata de una forma de alquiler muy demanda entre ciertos turistas que optan por opciones más "inmersivas" en sus viajes. 

"Este decreto es un paso adelante para los que comparten casa en Cataluña y que han sufrido una continua inseguridad normativa en los últimos años", señalan desde la compañía. 

El proceso se inició hace cinco años, cuando la Generalitat se propuso revisar el marco regulatorio del turismo. La evaluación concluyó ayer, con la aprobación del nuevo Decreto. 

Desde Airbnb destacan su papel como "pioneros" en la puesta en marcha de soluciones para "luchar contra los malos actores". En concreto, en 2018 inició un sistema para que los anfitriones cumplieran la regulación regional mostrando su número de registro exigido por la normativa. 

En este sentido, consideran que su objetivo siempre ha sido "ayudar a los residentes a alojar viajeros en su hogar de manera responsable, diversificando el turismo, protegiendo la vivienda, siguiendo la normativa vigente y pagando sus impuestos" mediante un trabajo coordinado con las Administraciones públicas.