Cuenta atrás para la reactivación del turismo. A partir del 1 de julio, España abre sus fronteras al turismo internacional con la intención de salvar parte de la temporada en verano. Para ello, el Gobierno ya estudia qué medidas se implementarán en los 46 aeropuertos de toda España.
Fuentes del Gobierno avanzan que los turistas y visitantes tendrán que enfrentarse a tres pruebas para poder llegar al destino vacacional. La primera consiste en rellenar un cuestionario epidemiológico por escrito para demostrar que el turista “está limpio” del virus y declarar no tener ningún síntoma como fiebre o tos; algo que, por otro lado, ya se estaba realizando en 15 aeropuertos.
La medida se extendería ahora a todos. En este caso, se apela a la responsabilidad de los pasajeros.
El segundo control consiste en la toma de temperatura a los pasajeros (también vigente en la actualidad). Y la última y más sorprendente de las medidas es un “control visual del turista” para comprobar en el momento su estado de salud. En caso de tener fiebre o algún síntoma, podrá ser aislado como ya ocurrió en el vuelo Madrid-Lanzarote con un pasajero que dio positivo por Covid-19.
Además, las aerolíneas, las navieras, Renfe y las empresas de autobús tendrán que mantener durante "un mínimo" de cuatro semanas los datos de los viajeros que transporten, con el fin de poder realizar una trazabilidad y contactar con ellos en el caso de que se detectara un caso de coronavirus entre ellos.
Estas medidas formarán parte del protocolo de los aeropuertos junto con las recomendaciones de la Agencia Europea de Seguridad Aére (EASA). Aena ha sido el primer gestor aeroportuario en sumarse a la iniciativa de las pruebas piloto de la agencia europea en cuatro aeropuertos.
Cabe recordar que durante el estado de alarma solo se permite volar en vuelos de repatriación o por cuestiones justificadas como desplazamientos sanitarios o por trabajos. Es obligatorio llevar mascarilla (y seguirá siéndolo), mantener la distancia física en los aeropuertos y acercarse a recoger el equipaje de forma individual.
Compensación a Aena
Aena pondrá a disposición de Sanidad Exterior los recursos humanos, sanitarios y de apoyo necesarios para garantizar el control sanitario de la entrada de pasajeros de vuelos internacionales, lo que se particularizará a través de un convenio de colaboración con Sanidad Exterior que permitirá la compensación a Aena por el desembolso que realice para desarrollar esta labor.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró que el Gobierno ha habilitado a Aena para tomar medidas en materia de contratación y de refuerzo del personal para llevar a cabo estas medidas, además de establecer los mecanismos para compensar este desembolso.
Apertura de aeropuertos
A la par, Aena constituyó en abril el llamado Grupo de Recuperación Operativa, centrado en que en el momento en que se levanten las limitaciones a la movilidad, las operaciones se puedan recuperar de forma segura y ágil en función de la demanda.
“Se trabaja en las medidas necesarias para recuperar la confianza de pasajeros y trabajadores, siempre siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias y del Transporte, tanto en materia sanitaria como de movilidad, respectivamente”, señalan a este medio fuentes del gestor aeroportuario.
Entre sus líneas de actuación están la limpieza y desinfección, distancia de seguridad, medios de protección, señalización e información, comunicación, adaptación de procesos y adaptación de infraestructuras.