El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ultima un caso antimonopolio contra Apple por sus estrategias para proteger la posición de dominio del iPhone, según informa The New York Times.
La justicia estadounidense investiga cómo Apple se vale del control sobre su hardware y software para dificultar que los consumidores cambien de dispositivo móvil, dañando así la competencia.
En concreto, los investigadores han analizado el caso del Apple Watch, el cual funciona mejor con el iPhone que con smartphones de otras marcas. Asimismo, también señalan el hecho de que el gigante de la manzana excluya el resto de sistemas operativos del uso de su servicio de mensajería, iMessage.
Igualmente, la justicia ha puesto el foco en el sistema de pagos que la empresa con sede en Cupertino (California), en tanto que impide que otras financieras ofrezcan servicios de pagos aplazados. Este es un servicio que Apple ofrece a sus clientes en Estados Unidos pero que no está disponible en Europa.
Desde el Departamento de Justicia se está revisando el resultado de la investigación y ya se han reunido con Apple en varias ocasiones. Con todo, todavía no se ha tomado una decisión final sobre si presentarán una demanda contra la tecnológica.