"No vemos ningún impacto de un potencial paquete de remedies, al menos los que estamos negociando, en la financiación", ha asegurado este jueves Meinrad Spenger, consejero delegado de MásMóvil, en el encuentro con los analistas tras la presentación de los resultados del grupo correspondientes a los nueve primeros meses de 2023.

Cuando cerraron su proyecto definitivo de fusión a finales de julio de 2022, Orange y MásMóvil comunicaron que la operación estaba respaldada por un paquete de deuda de 6.600 millones de euros (que incluye también líneas adicionales de liquidez) que había sido acordado con un "sólido" grupo de bancos internacionales. 

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A este respecto, David Pérez Renovales, director financiero de MásMóvil, ha señalado que ya han trasladado a los bancos que comprometieron la financiación para la operación que su joint venture (JV) con Orange generará la caja suficiente para cubrir dichas facilidades de financiación. 

De hecho, también ha incidido en que los remedies no afectarán a la capacidad del grupo fusionado de hacer frente a su endeudamiento y ha confirmado que no está previsto reducir la cantidad acordada con la banca a cuenta de la venta de algunos activos como consecuencia de las concesiones que se acuerden con Bruselas. 

Montaje con los logos de Orange y MásMóvil. Diseño: Arte EE

A este respecto, Spenger ha añadido que, en estos momentos de la negociación del paquete de remedies, las operadoras no prevén obtener "beneficios relevantes" de la desinversión forzosa de activos que pueda exigir la Comisión Europea para autorizar la fusión. 

De los 6.600 millones de euros comprometidos con los bancos, 5.850 millones de euros irán destinados a pagar un superdividendo a ambas compañías con el objetivo de equilibrar su participación en la joint venture, que será del 50/50 pese a que los dos operadores no llegan en las mismas condiciones a la fusión.

Dividendo e inversión

Esta distribución a los accionistas por parte del nuevo grupo combinado será, por tanto, "asimétrica", ya que lleva implícita el reequilibrio del valor patrimonial a favor de Orange para reflejar los diferentes niveles de deuda con las que se incorpora cada una de las compañías a la fusión.

Mientras que Orange entrará a formar parte de la empresa combinada sin deuda, MásMóvil aportará toda la que tenga en el momento del cierre de la operación (a cierre de septiembre de 2023, unos 6.500 millones de euros). De esta manera, se estima que el endeudamiento de la empresa fusionada supere los 12.000 millones de euros.

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Con consecuencia de este escenario, el grupo francés de telecomunicaciones percibirá en el marco de esta operación alrededor de 4.200 millones de euros del superdividendo acordado, mientras que los fondos propietarios del Grupo MásMóvil recibirán los 1.650 millones de euros restantes.

El resto de la financiación obtenida se dedicará a cubrir otras partidas. Dentro de la cifra restante se incluye una línea de crédito revolving por importe de 600 millones de euros que está destinada a gastos de capital (capex), es decir, a inversiones, que previsiblemente se emplearán sobre todo para avanzar en el despliegue del 5G. 

Remedies

Las afirmaciones de MásMóvil sobre el nulo impacto que tendrán los remedies en la financiación se producen en un momento en el que las dos operadoras están cerca de cerrar un acuerdo definitivo con un tercero sobre las medidas que permitirían calmar las dudas de Bruselas sobre el impacto de la operación en la competencia. 

Según se ha publicado esta semana, Orange y MásMóvil tienen acuerdos preliminares con Digi y otros operadores para que sean receptores de dichos remedies, aunque en el encuentro con los analistas de este miércoles Spenger ha rehusado dar nombres de compañías ni detalles sobre cuáles podrían ser las medidas incluidas en esos acuerdos.

Logos de Orange y MásMóvil en sus respectivas sedes en Madrid. Europa Press

Lo único que ha apuntado es que no prevé que su red móvil se incluya en este proceso dado que es "relativamente pequeña" en comparación con la que tienen el resto. En concreto, en su caso está compuesta por poco más de 5.000 sites (como antenas o torres de telecomunicaciones), frente a la media de 20.000 de los operadores tradicionales. 

Según el CEO de MásMóvil, pronto se cerrará el acuerdo con la compañía que sea receptora de los remedies, aunque la aprobación de Bruselas se retrasará finalmente hasta mediados o finales de 2024. Una vez presentado el acuerdo, la CE tiene un plazo de 50 días laborables para decidir su autoriza o veta la fusión de la que está pendiente todo el mercado europeo de las telecomunicaciones.