Según han confirmado a EL ESPAÑOL-Invertia fuentes conocedoras, en Escribano "no descartan" seguir adquiriendo en un futuro títulos de Indra para ganar un mayor peso en su accionariado, donde hoy por hoy únicamente la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) le supera en acciones con un 25,16% del total. 

Las fuentes se remiten a las afirmaciones realizadas por Escribano el pasado mes de mayo cuando la compañía irrumpió en el capital de Indra tras adquirir un 3% de la empresa en una operación valorada en 65 millones de euros. 

[Escribano eleva hasta el 8% su participación en Indra]

Ángel Escribano, consejero delegado de Escribano, confirmó entonces en una conversación telefónica con este periódico que la intención de la empresa era alcanzar el máximo porcentaje posible de Indra, "cerca del 10%" antes de finales de 2023 y "poder tener representación en el consejo de administración".

Sin embargo, las fuentes señalan que en estos momentos en la empresa de tecnología para el sector de la defensa y la seguridad no tienen fijados plazos concretos para seguir elevando su participación en el accionariado de Indra y acercarse a ese objetivo del 10%. 

Fachada en la sede de Indra en Madrid. Jesús Hellín Europa Press

Escribano ha tardado algo más de seis meses en adquirir el 4,6% comunicado este viernes y que le ha permitido elevar su peso en el capital de Indra hasta el 8%. Esta participación tiene un valor de mercado de 203 millones de euros, dado que las acciones la compañía de tecnología y defensa han cerrado la semana en los 14,39 euros.

La empresa fundada en 1989 por los hermanos Escribano supera así a otros accionistas de referencia de Indra como Sapa Placencia (5%); Amber Capital, el fondo británico fundado por Joseph Oughourlian (7,24%), y la firma de inversión Fidelity (7,88%), según los últimos datos proporcionados por Indra con fecha de 27 de julio de 2023.

Consejo de administración

El incremento de la participación de Escribano hasta el 8% abre también una nueva incógnita sobre el futuro del consejo de administración de Indra, ya que el porcentaje alcanzado por la empresa le daría derecho a solicitar un asiento en el máximo órgano rector de la empresa presidida por Marc Murtra.

Las fuentes consultadas por este periódico apuntan que, hasta este momento, Escribano no ha solicitado entrar en el consejo de administración de Indra y tampoco está decidido cómo sería el proceso para cumplir con su petición.

(I-D) El nuevo consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, y el presidente de Indra, Marc Murtra, durante la junta general ordinaria de accionistas de Indra 2023. Matias Chiofalo Europa Press

Actualmente el consejo de administración de Indra está compuesto por un total de 16 miembros, el máximo que permiten los estatutos de la compañía. De estos, la mitad son consejeros con la categoría de independientes. Los otros ocho son el presidente, dos ejecutivos y cinco dominicales en representación de Sepi (3), Sapa (1) y Amber Capital (1).

Con este escenario, para que Escribano tenga un consejero en Indra sería necesario que uno de los actuales miembros de este órgano dejara su puesto vacante o que se modificarán los estatutos para ampliar el número máximo de miembros que puede tener el consejo.

Dos escenarios

En el primero de los escenarios, la cuestión está en qué consejero debe renunciar a su cargo. En el caso de que Escribano se quedara con el puesto que ocupa actualmente un independiente, Indra incumpliría la recomendación 17 del Código de buen gobierno elaborado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que establece que al menos la mitad de los consejeros tengan esa categoría.

Este aspecto fue clave hace un año en la recomposición del consejo de administración de Indra tras la crisis de gobernanza que se vivió en tras la junta de junio de 2022 cuando fueron cesados la gran mayoría de los consejeros independientes a petición de su accionista Amber, con el apoyo de la Sepi y Sapa.

[Indra logra el respaldo de los accionistas a los nuevos consejeros independientes y cierra su crisis de gobernanza]

La compañía, con la ayuda de la consultora Korn Ferry, diseñó un nuevo consejo en el que la mitad de sus miembros eran independientes y se eliminó el voto dirimente del presidente en caso de empate. La compañía lograba así cumplir con "los estándares más exigentes de gobierno corporativo" y darle a Sepi el tercer consejero que le correspondía.

El pasado mes de junio, Indra elevó de 14 a 16 los miembros del consejo con el mismo objetivo, que la mitad de sus miembros siguieran siendo independientes y dar entrada a un accionista que había alcanzado una participación en el capital que le permitía optar a un consejero, en esta ocasión Amber Capital.

Sede de Indra en Alcobendas (Madrid). Indra

Para evitar acabar con este equilibrio, la alternativa sería que el representante de Escribano sustituyera a uno de los dos consejeros ejecutivos o a uno de los cinco dominicales. De estos últimos, el único accionista que tiene un representante en el consejo sin alcanzar la participación mínima para ello es SAPA Placencia, que ostenta un 5% del capital. 

El segundo escenario pasaría ampliar el número de miembros que componen el consejo de administración de la empresa de tecnología y defensa, una propuesta que exige un cambio en los estatutos y que, además, debe ser aprobada en junta de accionistas.

Pero, de llevarse a cabo este cambio, el número de miembros del consejo de administración de Indra se alejaría aún más del máximo de 15 componentes que aconseja el código de buen gobierno de la CNMV en su recomendación número 13 para lograr un funcionamiento eficaz y participativo de este órgano.