La irrupción de nuevos actores en el mercado de las telecomunicaciones español, y especialmente el auge de Digi, ha provocado que las tres operadoras tradicionales (Telefónica, Orange y Vodafone) hayan visto caer su cuota de mercado de forma constante tanto en términos de ingresos como de clientes en los últimos tiempos.
Los últimos datos trimestrales publicados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) reflejan que apenas dos años, las tres principales empresas de telecomunicaciones de nuestro país han perdido 7,4 puntos de cuota de mercado en el negocio de banda ancha fija y cuatro puntos en el de telefonía móvil, medido en número de líneas.
Aunque estas tres compañías siguen copando siete de cada diez líneas tanto de Internet como de móvil, lejos quedan los tiempos en que los que suponían más del 80% del mercado. Primero fue la irrupción de MásMóvil, que durante años lideró el crecimiento en clientes en España, tanto en términos orgánicos como gracias a las compras de Yoigo, Pepephone o, más recientemente, Euskaltel.
Sin embargo, en los últimos tiempos el gran ganador ha sido Digi. Pese a que la operadora de origen rumano lleva alrededor de 15 años en España, su auge ha sido especialmente notable en el último lustro, cuando comenzó a desplegar su red propia fibra y a atacar el mercado con precios más bajos que los de sus competidores.
El servicio en el que mayor impacto ha tenido en los últimos años la irrupción de nuevos actores como Digi ha sido el de la banda ancha fija. En el cuarto trimestre de 2022 el 74,4% de las líneas de Internet a través de fibra o cualquier otra tecnología pertenecía a Movistar, Orange y Vodafone, según los últimos datos recopilados por la CNMC.
Banda ancha fija
Aunque esto supone que todavía tres de cada cuatro líneas que hay en España corresponden a uno de los tres principales operadores, este porcentaje ha seguido en los últimos tiempos una clara tendencia a la baja. En concreto, supone 3,4 puntos porcentuales menos que el que se registraba a cierre de 2021 y 7,4 puntos menos que el de diciembre de 2020.
Las tres grandes operadoras, sin excepción, han perdido cuota de mercado en este periodo. Movistar se ha dejado tres puntos porcentuales en dos años, al pasar del 37,1% que representaba a finales de 2020 al 34,1% en diciembre de 2022, mientras que la cuota de Orange ha descendido en el mismo periodo del 24,5% al 22,7%.
Por su parte, Vodafone ha cerrado 2022 con una cuota en banda ancha fija del 17,5%, frente al 20,2% del mismo mes de 2020. La compañía se ha visto superada incluso por tercer trimestre consecutivo por el Grupo MásMóvil, que concluyó el pasado año con el 18,6% del total de líneas.
Aunque en estos dos años, MásMóvil (incluyendo los datos de Euskaltel, integrada en el verano de 2021) ha logrado elevar en 2,4 puntos porcentuales su cuota, el mayor aumento lo han registrado los operadores incluidos en la categoría Resto, que ha pasado en solo dos años de representar el 2,1% del total a suponer el 7%.
En esta categoría está englobado Digi, el operador que más está creciendo en el mercado en los últimos tiempos. Aunque la CNMC no desglosa sus datos, la propia compañía informó de que en 2022 ganó más de 360.000 líneas de banda ancha fija y cerró el año con más de 840.000.
Por el contrario, el pasado año Telefónica se dejó unas 20.000 líneas en España, mientras que la base de clientes de Orange en esta categoría descendió un 1,2%. Vodafone, cuyo ejercicio fiscal es diferente al del resto de operadoras españolas y concluye el 31 de marzo, informó recientemente de que en los tres últimos meses de 2022 perdió 27.000 usuarios de banda ancha fija.
Negocio móvil
En el caso de la telefonía móvil, donde el número de actores siempre ha sido más elevado que en la banda ancha fija dado el amplio mercado de operadores móviles virtuales (OMV) que existe en España, la cuota de mercado conjunta de Telefónica, Orange y Vodafone a cierre de 2022 era del 70,6%.
En último año, las tres compañías han perdido 2,1 puntos porcentuales de cuota conjunta, ya que en el cuarto trimestre de 2021 se situaba en el 72,7%. En comparación con el 74,6% que se registraba a cierre de 2020, la caída en dos años se eleva a cuatro puntos porcentuales.
En este caso, los cambios que está efectuando la CNMC en su portal de datos hacen que sea más complicado acceder al histórico de los operadores y su comparativa. Sin embargo, los últimos datos mensuales reflejan una caída de alrededor de dos puntos porcentuales en el caso de Movistar en los últimos dos años, de 1,2 puntos en el caso de Orange y de Vodafone.
Por su parte, el Grupo MásMóvil ha ganado casi tres puntos porcentuales en estos dos años, aunque más de la mitad de esta subida se debe a la incorporación a su base de clientes los usuarios móviles de Euskaltel, hasta julio de 2021 englobada en la categoría de los OMV. Por su parte, en solo un año los operadores virtuales han logrado ganar alrededor de 1,4 puntos de cuota.
Ingresos minoristas
Las datos trimestrales de la CNMC también informan sobre la cuota en términos de ingresos minoristas de los tres grandes operadores, aunque en este caso la fotografía que muestra el regulador no es exactamente la del negocio de telecomunicaciones, ya que también incluye datos del sector audiovisual, como por ejemplo la facturación de Atresmedia y Mediaset.
En este caso Telefónica, Vodafone y Orange coparon en el último trimestre de 2022 el 71,6% de los ingresos minoristas, lo que supone 1,8 puntos porcentuales menos que en el cuarto trimestre de 2021 (73,4% del total) y 1,5 puntos menos que en el mismo periodo de 2020 (73,1%).
Por operadoras, Telefónica es claramente líder de mercado con una cuota en el cuarto trimestre de 2022 del 41,4% del total. A continuación se sitúan Orange con un 15,7%, Vodafone con un 14,4% y el Grupo MásMóvil con un 10,1%.