El plan de MásMóvil para convertirse en el segundo operador español en dos años
La pérdida de valor de Orange y Vodafone y su crecimiento orgánico son sus armas para asaltar el olimpo de las 'telecos' en España.
6 agosto, 2021 02:51Noticias relacionadas
MásMóvil cerró este jueves su opa lanzada el pasado 28 de marzo con un 98% de aceptación, una cifra récord para el mercado español en los últimos quince años y solo comparable con la opa sobre Europac.
Un proyecto que comienza a andar con vocación de ser en breve plazo el tercer operador español -actualmente es el cuarto-, pero con el verdadero horizonte de estar solo por detrás de Telefónica de aquí al año 2023.
Un objetivo que con los actuales números en la mano se antoja difícil, pero que analizando la evolución del mercado parece alcanzable. Para ello, en MásMóvil confían en dos elementos principales: el primero es la pérdida de valor de sus competidores, principalmente Vodafone y Orange, y el segundo es su propio crecimiento orgánico.
Si estos dos supuestos se cumplen -algo que no es descabellado considerando la evolución del mercado en el último lustro- MásMóvil podría estar en condiciones de situarse por ingresos, por encima de Orange y Vodafone y por valor de activos, muy cerca de estos dos.
Esto les permitiría llegar en el mediano plazo con el suficiente músculo como para consolidarse en el segundo lugar e incluso poder abordar la compra de una de estas dos operadoras. En el caso de Vodafone, las negociaciones fracasaron a comienzos de este año y en cuanto a Orange estaríamos ante las primeras exploraciones oficiales.
Ingresos de las operadoras
Pero primero MásMóvil debe comenzar ya a cumplir su hoja de ruta que pasa por reforzar su red, apurar las sinergias con Euskaltel, seguir arrebatando clientes a sus competidores y controlar la importante deuda de 2.000 millones que ha contraído tras la compra. El reto es mantener la tranquilidad financiera al tiempo que se sigue reforzando la actividad comercial.
El punto de partida de la nueva MásMóvil-Euskaltel son 14 millones de servicios de móvil y de banda ancha contratadas, más de 26 millones de hogares comercializables con la fibra óptica, 5G en cerca de 500 municipios españoles, unos ingresos de 2.700 millones de euros anuales y una plantilla de más de 1.900 personas.
Los datos de la CNMC al cierre de 2020 indican que en ingresos minoristas MásMóvil y Euskaltel sumarán un 11,2% del mercado, frente al 16,7% de Vodafone, al 15,9% de Orange y al 40,6% de Telefónica. Es decir, solo cinco puntos de diferencia de sus principales competidores.
En cuanto a clientes, en el mercado de líneas de banda ancha las dos operadoras suman un 16,1% del mercado, mientras que Vodafone llega al 20,2% y Orange al 24,5%. Telefónica se dispara en este apartado con un 37,1%.
Finalmente, en el mercado de líneas móviles, MásMóvil y Euskaltel suman poco más del 19% del mercado por el 22% de Vodafone, el 23,3% de Orange y el 29,4% de Telefónica. Aquí las distancias son mucho más pequeñas entre las operadoras.
Guerra comercial
Desde el punto de vista comercial las dos compañías fusionadas son las que más crecen. La suma de las portabilidades del grupo MásMóvil y de Euskaltel colocó a los amarillos como la compañía que más líneas fijas y móviles arrebató a su competencia en el mes de julio.
MásMóvil registró 25.000 nuevas líneas móviles, su mejor registro en más de un año, mientras que Euskaltel sumó 16.600. En conjunto sumaron 41.000 altas móviles, lo que le permitió casi duplicar a su más cercano perseguidor: Digi, que sumó 27.400 en julio.
En portabilidades fijas -líneas de hogar y de internet- MásMóvil suma 19.000 líneas en julio, mientras que Euskaltel mejora en 5.100, su récord en el último año. Entre los dos se llevan 24.100, lo que les permite más que triplicar las 7.200 líneas de Digi.
A partir de estos datos, la compañía fusionada deberá poner en marcha un nuevo plan de negocio centrado en ganar cuota en los mercados de las grandes ciudades del centro y sur de España y apostando por los despliegues de fibra y por el 5G.
Los analistas del mercado consideran que ambas compañías son complementarias a nivel de infraestructuras y en su actividad comercial, ya que MásMóvil cuenta con una presencia muy relevante a nivel residencial y Euskaltel también dispone de una amplia presencia en el segmento de empresas y Administraciones públicas.
Competencia en la Zona Norte
Desde el punto de vista técnico, MásMóvil y Euskaltel comparten la red de Orange, lo que les sitúa en un buen punto de partida para integrar sus redes. No está del todo claro, pero lo normal es que MásMóvil comience a migrar parte de la red de Euskaltel a sus propias infraestructuras, en especial de fibra, y dejando solo lo estrictamente necesario con Orange.
Otro de los puntos claves de esta estrategia será el uso de Virgin como palanca de crecimiento. Virgin (Euskaltel) es la marca que más clientes gana en el último semestre y con un ARPU muy superior al de la competencia.
Esto puede hacer que MásMóvil utilice esta marca para aumentar cuota en clientes de alto valor, un segmento que hasta ahora cubría con Yoigo, pero sin una oferta de televisión completamente integrada en sus paquetes convergentes.
Este posicionamiento puede ser definitivo en el nuevo rumbo de MásMóvil, haciendo mayores esfuerzos por competir en el segmento de paquetes convergentes triples (hasta ahora solo apuesta por fibra y móvil).
Otro elemento a tomar en cuenta es que la nueva compañía ya esta líder en la zona norte de la mano de Euskaltel a través de sus marcas: R en Galicia, Euskaltel en País Vasco y Telecable en Asturias. Esto les permitirá focalizar sus esfuerzos en la zona centro y sur donde pueden atacar directamente el segundo lugar de Orange y el tercero de Vodafone.
¿Fusiones a la vista?
Las fuentes consultadas indican que no es descartable en el horizonte de dos años, aunque MásMóvil intentará ser el protagonista. Para ello juega a su favor la pérdida de valor de sus competidores.
En los tres últimos años Vodafone ha reducido el valor de sus activos en España hasta los actuales 6.890 millones de euros, después de la última actualización del grupo. En 2018 se hizo un ajuste de 2.900 millones de euros y en mayo de 2020 otros 840 millones.
Algo similar está pasando con Orange. En sus últimos resultados semestrales anunció la realización de un ajuste contable o 'impairment' de su filial española de 3.700 millones de euros. Las causas son similares, la pérdida de valor del negocio en España. Una situación que podría seguir deteriorándose en los dos casos, según creen en MásMóvil.