El 'sandbox' fintech abrirá su segunda convocatoria el próximo 1 de septiembre

El sandbox fintech español pone fechas a su segunda convocatoria. Cuando aún se están perfilando los protocolos de colaboración de los proyectos admitidos en su primera ventana, la Secretaría General del Tesoro ha publicado una resolución por la que establece que comenzará a recibir candidaturas el próximo 1 de septiembre.

El buzón del Tesoro Público, que seguirá siendo la institución encargada del desarrollo del sandbox español, estará abierto hasta el 23 de octubre. Como en la convocatoria de estreno, los proyectos candidatos han de contar con un grado de madurez suficiente como para comenzar a operar de forma inmediata, además de suponer un potencial beneficio para los usuarios, aumentar la eficiencia o proporcionar mecanismos para la mejora de la regulación.

En este sentido, conviene recordar que, de las 67 candidaturas registradas en la primera convocatoria, finalmente solo 18 fueron admitidos para participar en el sandbox. Una ratio de aceptación exigente que, sin embargo, desde el Tesoro se señaló como ejemplo de su nacimiento como "uno de los más ambiciosos a nivel internacional".

Plazos de admisión

Al igual que ocurrió en la primera convocatoria, una vez se cierre el plazo de recepción de candidaturas, comenzará un periodo de análisis de un mes ampliable a uno más en función de la complejidad o el volumen de solicitudes. Así, el arranque formal de esta segunda cohorte llegaría a finales de noviembre o principios de diciembre.

Con el anuncio de los 18 primeros admitidos, desde el Ministerio de Asuntos Económicos se explicó que los proyectos que fueron rechazados porque "no estaban lo suficientemente avanzados" podrían volverse a postular en esta segunda ronda si han conseguido solventar los peros con los que se toparon hace unos meses.

Protocolos en estudio

El objetivo vuelve a ser que el número de proyectos finalmente admitidos esté disponible en un plazo de 15 días después de consultar a los supervisores de cada ramo. Sin embargo, los proyectos que queden excluidos volverán a recibir una resolución motivada específica que no verá la luz pública.

Actualmente, los admitidos del primer corte están desarrollando los protocolos de colaboración con los supervisores de su ramo. La Ley de Transformación Digital del Sistema Financiero marca un periodo máximo de tres meses para establecer estos mecanismos. La mayor carga de trabajo está en el Banco de España, al que le ha correspondido la tutela de diez proyectos frente a los cuatro que recaen sobre la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y otros tantos para la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones.