Máxima expectación en la junta de accionistas de Endesa, celebrada en Madrid, tras la decisión del Gobierno italiano de Giorgia Meloni de cesar a la cúpula directiva actual de Enel. El final de Francesco Starace al frente de una de las mayores energéticas del mundo, que se aprobará el próximo 10 de mayo, deja en el aire la estrategia empresarial de su filia en España.
Sin embargo, Juan Sánchez-Calero, presidente de Endesa, ha dicho que "pese a los cambios en la cúpula directiva de Enel no se espera, en principio, que haya ningún cambio en la de Endesa ni en su estrategia empresarial".
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, por su parte, ha pedido "estabilidad jurídica y regulatoria", ante la "incertidumbre" vivida a lo largo del año pasado por la crisis en el sector energético motivada por la invasión de Ucrania por Rusia, para abordar las "enormes" inversiones que son necesarias para garantizar la transición y la independencia energética.
En su discurso ante la junta general de accionistas de la compañía, Bogas consideró que 2022 fue un ejercicio marcado por los "permanentes cambios regulatorios, la intervención del mercado eléctrico, la desinformación y la respuesta que ha dado el sector".
A este respecto, apuntó que durante el año el sector tuvo que gestionar unos 74 cambios regulatorios: 32 normas y 6 Reales Decretos que modificaban a su vez otras 42 normas anteriores. Toda esta montaña rusa de cambios regulatorios, unidos a las 57 modificaciones regulatorias de 2021, hicieron "sumar 131 cambios normativos en 24 meses", añadió.
La tercera mayor contribuyente
Además, Bogas ha resaltado que "Endesa se sitúa entre las tres empresas con una mayor contribución fiscal en España con 3.843 millones de euros en el ejercicio 2022, de los cuales, un 43% se corresponden con impuestos soportados y un 57% con recaudados".
El responsable de la eléctrica ha pedido al Gobierno y a las instituciones que "mantengan un diálogo fluido" para contribuir a que las políticas energéticas que se apliquen sean beneficiosas para el conjunto de la ciudadanía.
Asimismo, defendió que la reforma del mercado eléctrico en Europa sea "homogénea a nivel europeo", contando con el "mayor grado de consenso y que no haya soluciones particulares", ya que "podría romper el mercado".
De esta manera, el ejecutivo de Endesa rompió una lanza en favor de la propuesta de reforma de la Comisión Europea, que aboga por mantener el sistema marginalista y no establecer precios regulados para las instalaciones nucleares o hidráulicas ya amortizadas, frente a la más intervencionista sobre los precios a la que aspira el Gobierno español.
En este sentido, dejó claro que, en su opinión, el enfoque que la Comisión Europea ha dado a la reforma "va en la buena dirección: evitar la intervención de precios sobre la generación y facilitar la contratación a plazos más largos".
Por ello, advirtió de que es ""absolutamente prioritario" que la reforma sea "homogénea a nivel europeo, que se haga con el mayor grado de consenso y que no haya soluciones particulares".
Adpatar el PNIEC
Respecto al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), la 'hoja de ruta' a 2030 del Gobierno para la transición energética y cuya revisión debe ser enviada a Bruselas antes de finales de junio, el consejero delegado afirmó que es "preciso revisar y adaptar" algunas de sus hipótesis y escenarios para dar "firmeza al sistema durante la transición energética".
Asimismo, abogó por revisar todo lo que concierne a permisos y su impacto en el despliegue de renovables, así como dar seguridad jurídica a las necesarias inversiones en redes de distribución o puntos de recarga para fomentar la movilidad eléctrica.
Bogas, que volvió a insistir en que en Endesa "no ha habido beneficios caídos del cielo", ya que la eléctrica ha vendido su propia energía en línea con las medidas específicas que ha estipulado el regulador.
De hecho, se han fijado un tope a los precios de venta de las energías inframarginales del mercado libre de 67 euros/MWh, y por este mismo motivo la empresa se opone al gravamen sobre los ingresos con una tasa del 1,2% impuesto por el Gobierno al sector, ya que se trata en verdad de un impuesto a los ingresos, "no a unos beneficios extraordinarios que no han existido".
Por otra parte, el directivo repasó los principales hitos financieros y de negocio logrados por Endesa a lo largo del pasado ejercicio y recalcó que, a pesar de todo, "hoy podemos afirmar que estamos mejor que hace un año, especialmente por la bajada de los precios del gas".
"Si bien es cierto que no hay certidumbre sobre el comportamiento que podría tener el precio del gas en el medio plazo. Por ello, no debemos bajar la guardia", advirtió.