Iberdrola registró un beneficio neto de 3.104 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 29% más con respecto al mismo periodo del año anterior, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Además, el resultado bruto de explotación (EBITDA) creció un 17% hasta los 9.529 millones de euros, "con una evolución positiva en todas las geografías exceptuando de nuevo España", destaca la compañía.
Las inversiones brutas orgánicas en el periodo se situaron en los 7.568 millones de euros, un 14,2% más. Dentro de dichas inversiones, la empresa destinó un 40% a redes y un 49% a generación renovable.
Respecto a la apuesta de la compañía en renovable, destaca la inversión realizada con EIP en Wikinger para potenciar su cartera de eólica marina, el acuerdo con Sempra en Estados Unidos para el desarrollo del hidrógeno verde, la alianza con BP para el desarrollo de 11.000 puntos de recarga en España y Portugal o el acuerdo con Shell para promover energía marina eólica flotante en el Reino Unido.
"Seguimos contribuyendo a un sistema energético más autosuficiente, sostenible y competitivo. Acelerar las inversiones en electrificación nos permitirá ser menos dependientes de la volatilidad del petróleo y el gas y generar más crecimiento y más empleo, como demuestran estos resultados", aseguró Galán.
Deuda financiera
Por otra parte, el gasto operativo neto aumentó un 20,2% y alcanzó los 3.791,4 millones de euros siendo la variación interanual del 7% excluyendo el impacto del tipo de cambio y el efecto no recurrente del impacto positivo.
Asimismo, la deuda financiera neta ajustada se situó en los 44.293 millones de euros, un aumento del 19% respecto a septiembre 2021 debido al "esfuerzo inversor del periodo, la apreciación de las divisas y el incremento del capital circulante", detalla Iberdrola.
La energética cuenta con el 75% de su deuda a tipo fijo, lo que le permite afrontar el nuevo contexto de tipos de interés. Mientras, el crecimiento del 28% en el flujo de caja, hasta los 8.200 millones de euros a cierre de septiembre, le ha permitido además incrementar su solidez financiera.
Además, Iberdrola tiene una liquidez superior a 24.000 millones de euros, que le permitiría cubrir sus necesidades financieras sin tener que salir al mercado durante 27 meses.
Contexto de crisis
En línea con el contexto de crisis actual, la compañía subrayó que "ha mantenido estable los precios a los clientes, a niveles muy inferiores a los del mercado de electricidad regulado, gracias a su generación renovable y de cero emisiones".
También recordó que, en los últimos 12 meses, aportó más de 7.800 millones de euros a las arcas públicas.