El suministro de gas de Argelia a España se mantiene con normalidad. Así lo explican fuentes del sector gasista a EL ESPAÑOL-Invertia. De hecho, descartan que pueda haber problemas en los próximos meses. No hay que olvidar que la empresa argelina Sonatrach tiene firmado un contrato con Naturgy de larga duración que vence en 2032 por un importe de 12.000 millones de euros que toca revisar ahora. 

Parece, por tanto, que la congelación de las relaciones comerciales con España decretada por el gobierno de Argelia este miércoles no afecta al sector energético. Desde Naturgy descartan hacer comentarios, pero recuerdan que "los socios argelinos siempre han cumplido con sus contratos comerciales, y son uno de los proveedores más fiables" que existen. 

De hecho, según explican, un corte del gas o alguna medida unilateral por parte de Sonatrach tendría que ser resuelta en un arbitraje internacional.

Además, la compañía argelina que negocia estos precios supone el 80% del PIB de aquel país, y aunque suministra gas por gasoducto también a Italia, y tiene una planta de licuefacción para poder vender gas por barco, España representa el 40% de sus exportaciones gasistas. 

"Las relaciones entre la comercializadora argelina (Sonatrach) y las empresas españolas que compran gas tienen obligaciones contractuales y confío en que sigan funcionando como lo que son, porque si no, sería un problema más complejo de resolver, no a través de relaciones diplomáticas, sino probablemente de arbitrajes o tribunales", ha dicho la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera.

En todo caso, Ribera ha asegurado que, "por ahora", su confianza es "máxima" porque los intercambios comerciales entre Sonatrach y sus clientes españoles "han venido funcionando muy bien".

Un dato importante teniendo en cuenta que Argelia es, en este momento, el segundo mayor suministrador de gas a España por detrás de Estados Unidos. En concreto aporta casi el 24%.

Segundo suministrador

Los últimos datos del Boletín Estadístico de Enagás muestran cómo durante el mes de mayo Sonatrach envió a nuestro país 9.545 GWh. Una cifra que supone un descenso del 35% respecto al mismo mes del año pasado. De esos 9.545 GWh, 9.049 GWh llegaron a través del tubo Medgaz. 

Argelia y Naturgy están en este momento inmersos en la negociación de los precios para el período 2022-2024, que tendrá carácter retroactivo. Se da por descontado que Sonatrach presionará para incrementar los precios dado el aumento que han sufrido el gas y el crudo en los últimos meses.  

La buena relación que existe entre Naturgy y Sonatrach no es motivo para que el gobierno argelino emplee el gas como herramienta de presión. Ya lo hizo el pasado mes de abril cuando advirtió al Ejecutivo de Pedro Sánchez que si enviaba gas argelino a Marruecos el grifo se cerraría de inmediato.

De momento la sangre no ha llegado al río. Ni parece que lo vaya a hacer en los próximos meses. En el sector existe el convencimiento de que las relaciones empresariales caminan independientes de las gubernamentales. Por tanto, se muestran confiadas en que no habrá problemas de suministro. 

Recuerdan también que Argelia tiene capacidad para enviar gas a España de sobra, pero también de enviar a otros países. De hecho, en los últimos meses el Ejecutivo argelino ha estado en conversaciones con Italia para venderle gas. ¿El objetivo italiano? Reducir sus importaciones de gas ruso, que alcanzan el 90%. 

Economía de gas

Desde el pasado 31 de octubre, Argelia ya solo exporta su gas a través de un tubo, el gasoducto Medgaz, propiedad de Sonatrach (con una participación del 51%) y Naturgy (con el 49% restante, a través del SPV en el que participa BlackRock) y existe un acuerdo de accionistas que les otorga el control conjunto del gasoducto.

El gasoducto del Magreb, que cruzaba territorio marroquí, cerró el grifo por el conflicto que llevaba meses arrastrando con su país vecino, Marruecos. 

Los hidrocarburos en Argelia representan el 91% del total de las exportaciones del país (39% gas natural, 37% crudo y 17% combustible). El resto de las exportaciones del país se componen de derivados de las industrias del petróleo y el gas (fertilizantes, amoníaco, aceites de la destilación de alquitranes) y productos agroalimentarios (el 92% del total de las exportaciones agrícolas son dátiles (73%) y algarroba y azúcar (19%)).

Además, los ingresos por exportaciones constituyen un poco más del 60% de los ingresos presupuestarios del estado argelino.