La central nuclear de Cofrentes (Valencia) quedará desacoplada de la red eléctrica nacional a la una de la madrugada de este viernes, 12 de noviembre, para dar comienzo a su vigésimo tercera recarga de combustible, en la que va a invertir más de 22 millones de euros.
Esta actuación pretende suponer un estímulo para el empleo y la economía del entorno, mediante la contratación de 1.200 profesionales de empresas de alta cualificación y la consiguiente repercusión en cuanto a ocupación hotelera y dinamismo en la restauración local. Los trabajadores se sumarán a los mil que trabajan normalmente en la planta.
Durante la recarga, con una duración prevista de 35 días, se sustituirán 228 elementos de combustible de los 624 que componen el núcleo del reactor, de manera que disponga de suficiente combustible fresco en la vasija para abordar un nuevo ciclo operativo, explica la nuclear.
También se realizarán las inspecciones periódicas de seguridad y el mantenimiento preventivo asociado que únicamente se puede realizar con la central parada, junto a 26 modificaciones o mejoras de diseño. Todo ello para garantizar que siga operando "con los mejores estándares de seguridad y fiabilidad".
En general, el equipo de planificación de recargas ha programado la ejecución de más de 11.000 trabajos para asegurar que se realizan con plena seguridad y siguiendo los criterios de calidad estipulados. La actuación propia de la recarga consiste en la descarga parcial del núcleo para el cambio de los 228 elementos citados y la sustitución de 14 barras de control y de 20 de sus accionadores.
Otras actividades previstas son la sustitución de uno de los rotores de baja presión de la turbina principal, que se complementará con una inspección del generador y con la revisión general de las válvulas de control y parada de la turbina, o la renovación del interruptor principal de generación por un modelo de última tecnología.
Esta recarga contempla formación de personal tanto en aspectos específicos de tecnología nuclear como en prevención de riesgos laborales. En total se han realizado más de 450 cursos específicamente diseñados, buena parte de ellos online debido a las restricciones que aplica la central por la pandemia.
La nuclear asegura que la recarga cumple con todos los protocolos requeridos por las autoridades sanitarias ante la afluencia de personal prevista, además de medidas preventivas y de campaña de información exhaustiva a las empresas colaboradoras para minimizar el riesgo a todos los trabajadores frente al coronavirus.