Los elevados precios del crudo impulsados por la falta de acuerdo en el seno de la OPEP+, que agrupa a los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y productores aliados como Rusia, así como la posibilidad de una batalla por ganar cuota en el mercado del petróleo que alimenten la inflación amenazan con dañar recuperación económica, según ha advertido la Agencia Internacional de la Energía.
"La posibilidad de una batalla por la cuota de mercado, aunque sea remota, se cierne sobre los mercados, al igual que la posibilidad de que los altos precios del combustible aviven la inflación y dañen una frágil recuperación económica", señala la agencia en su boletín mensual de julio.
En su análisis sobre la evolución del mercado petrolero, la AIE subraya la reacción bruscamente alcista experimentada por los precios del crudo en respuesta a la falta de acuerdo entre los miembros de la OPEP+, que alimenta la perspectiva de un déficit de oferta cada vez más profundo ante la reactivación de la demanda tras el levantamiento de restricciones.
En este sentido, recuerda que el bloqueo de las negociaciones de la OPEP+ significa que, hasta que se logre un compromiso, las cuotas de producción se mantendrán en los niveles de julio, provocando un sustancial ajuste de los mercados petroleros a medida que la demanda se recupere de la caída inducida por la pandemia el año pasado.
De hecho, señala que el exceso de existencias mundiales de petróleo acumulado durante el año pasado ya se ha digerido y las reservas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se encuentran ahora muy por debajo de los promedios históricos.
Asimismo, la agencia apunta que, si bien estos niveles de precios podrían aumentar el ritmo de electrificación del sector del transporte y ayudar a acelerar las transiciones energéticas, también alerta de que podrían frenar la recuperación económica, particularmente en los países emergentes y en desarrollo.
"Es probable que los mercados petroleros sigan siendo volátiles hasta que haya claridad sobre la política de producción de la OPEP+. Y la volatilidad no ayuda a garantizar transiciones energéticas ordenadas y seguras, ni beneficia a los productores ni a los consumidores", advierte la AIE.