La consejera delegada de Iberdrola España, Ángeles Santamaría, ha asegurado que iniciativas como el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE) representan "un primer paso en una buena dirección". También ha advertido de que, a pesar de que sectores como el de los hidrocarburos "luche como gato panza arriba" contra estas medidas para reformar la fiscalidad con el fin de descarbonizar la economía, "son inapelables y van a ocurrir".
En su comparecencia en la Comisión de Transición Ecológica del Senado, Santamaría afirmó entender "la resistencia" de estos sectores, ya que "cada uno vive de su negocio y tienen que defenderlo". Sin embargo, subrayó que no hay discusión" al respecto en medidas como el 'fondo verde' propuesto por el Gobierno para repartir las cargas que actualmente soporta el recibo de la luz por el desarrollo en el pasado de las renovables.
Así, la directiva recordó que otros países como Alemania o Reino Unido ya han adoptado o están estudiando adoptar medidas en este sentido para financiar las cargas por el desarrollo de las renovables.
En este sentido, Santamaría subrayó la necesidad de abordar una reforma de la fiscalidad energética y ambiental para alcanzar esa meta de la descarbonización de la economía. Es difícil incentivar la electrificación si sigue soportando más recargos fiscales que otros sectores energéticos.
Así, con una mayor carga fiscal de la electricidad que el gas o los carburantes, la consejera delegada de Iberdrola España estimó que esta reforma fiscal permitiría "un terreno de juego justo" y tomar las decisiones por parte de los consumidores en función de las señales de precio reales.
Inversiones en redes
Por otra parte, consideró "bastante contradictorio" el límite legal del 0,14% del PIB a las inversiones en redes eléctricas, ya que impide adaptarlas "al ritmo que se requiere y desarrollar la industria asociada".
A este respecto, afirmó que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno español a 2030 prevé inversiones un 50% mayores de las cantidades de los últimos años en redes, con unos 20.000 millones de euros frente a 14.000 millones de euros, que no se puede aumentar por ese límite y que podrían crear unos 18.000 empleos.